Recientemente el Ministerio de Hacienda y Crédito Público sometió al Congreso Nacional un anteproyecto de “Ley de Responsabilidad Fiscal”.

Con esta ley, las autoridades asumen el mandato de la Estrategia Nacional de Desarrollo que plantea el establecimiento de una Ley de responsabilidad fiscal en el marco de un pacto fiscal contenido en la Ley 12-01.

La pregunta fundamental para hacernos es para qué sirve una “Ley de Responsabilidad Fiscal”. En varios países, tales como Perú, Chile, Brasil, México, entre otros, las leyes de este tipo han mejorado la solvencia en las finanzas públicas y la calificación de la deuda soberana, Y que un país tenga solvencia en sus finanzas públicas permite disminuir los efectos de choques externos sobre la economía, suaviza los ciclos económicos y disminuye la frecuencia e impactos de las crisis.

El anteproyecto de ley que reposa en el Congreso plantea la “regla fiscal” que el gasto primario del sector público no financiero (SPNF) debe crecer al ritmo de la inflación promedio anual proyectada más 3.0 punto porcentuales.

La idea que subyace en esta regla es que si el gasto primario (gasto total menos intereses deuda) crece a una menor proporción que el PIB nominal (5 %+ las expectativas de la inflación) esto provocará en el mediano y largo plazo una caída en el coeficiente deuda/PIB hasta estabilizarlo en una meta del 40 %.

Otro elemento que establece el anteproyecto es la “cláusula de suspensión”, la cual señala que, durante periodos especiales como son los casos de: desastres naturales, epidemias, conflictos bélicos o cualquier fenómeno que altere el desenvolvimiento de la actividad económica, tales como las recesiones económicas que tengan pronósticos de crecimiento del PIB real negativos o inferiores al 1 %, se suspenderá temporalmente.

En definitiva, el anteproyecto de “Ley de Responsabilidad Fiscal” en su forma actual debe ser discutido y el Congreso Nacional debe preparar las condiciones para una discusión amplia que permita los consensos necesarios que contribuyan al fortalecimiento de las finanzas públicas, y mejore la calidad del gasto público.