Una “rebelión” inaceptable

Una “rebelión” inaceptable

Una “rebelión” inaceptable

Hugo López Morrobel

En nuestro país suceden cosas que son simplemente increíbles, porque iniciar una rebelión como la que está conmoviendo al atletismo, uno de las disciplinas donde existen las mayores posibilidades de triunfo en los próximos Juegos Centroamericanos y del Caribe, no tiene perdón de Dios.

Aunque los atletas decidan en último momento asistir a ese evento, ello no le quita ni un ápice a la crisis que envuelve a la Federación de Atletismo que se ha echado como enemigo a los principales competidores.
No es justo que después que se hace una inversión multimillonaria en la preparación de todo un personal atlético y técnico, se disparen misiles que podrían dar al traste con una buena actuación en la pista.

Esas son cosas que solo suceden en este país, porque en otras sociedades, situaciones tan delicadas como esta tendrían consecuencias para quienes la provocan.

Una sociedad pobre como la nuestra que está invirtiendo decenas de millones de pesos en preparar a sus atletas, no es justo que a horas de una competencia de ese nivel, surjan graves inconvenientes entre federados, técnicos y atletas de primer nivel.

Definitivamente, el Comité Olímpico Dominicano, la máxima autoridad del deporte, debe tomar cartas en el asunto y no permanecer callado, conociendo las consecuencias que conlleva una “rebelión” de esa naturaleza.

Que Dios nos coja confesado, porque esa crisis que ha brotado públicamente en los últimos días, es imperdonable en todo el sentido de la palabra.
Si ahora no se hace nada, si no se toman las medidas adecuadas, en lo adelante estaremos pagando las consecuencias.