No es personal

No es personal

No es personal

Ana Blanco

Muchas veces he escuchado que una de las claves para no entrar en un conflicto es no tomarte las cosas de manera personal.

La verdad que sobre el papel queda bien y parece fácil, pero a la hora de la práctica no lo es tanto.
Primero uno llega con todo su bagaje emocional que le marca muchas veces las reacciones ante diferentes situaciones y luego la contraparte que trae las suyas.

Pero al final si se analiza, uno puede controlar lo propio, no lo del otro. Y este normalmente actúa más cómo se siente que cómo cree que se siente el que tiene enfrente.
Entonces, si te encuentras con alguien que te agrede o te trata mal, hay que pensar que el problema lo tiene más él que tú y quitarle el poder de que te afecte.

No quiere decir que bajes la cabeza o que no te defiendas si es necesario, lo importante es que no se te quede dentro, que no te afecte o creas que es algo en contra de ti. Piensa que bastante tiene con ser así y al final esas personas suelen vivir amargadas y con verdaderos problemas.

Y por el contrario, no trates de transmitir a los demás tampoco tus problemas, de pagar con otros aquello que no puedes controlar o que te afecta. Aquí es importante trabajarse uno mismo, sé capaz de amortiguar esos fantasmas que a veces hacen su aparición y te llevan a tomar acciones de las cuales al final acabas arrepintiéndote.

Por lo tanto, no tomes personal las cosas que otros hacen, trabaja hacia dentro para estar en paz contigo mismo y cuando vengas a darte cuenta estarás en un estado de paz que te hará mejorar tus relaciones con los demás y, la más importante, contigo mismo.