Si se continúa por ese camino...

Si se continúa por ese camino…

Si se continúa por ese camino…

Hugo López Morrobel

Definitivamente, la gente está en pelota, y al parecer a la casi totalidad le importa, por lo menos eso aparenta, muy poco o nada la crisis que desde hace unos meses está afectando al Comité Olímpico Dominicano.

Es un trance que de no solucionarse rápido, de seguro, derivará en graves problemas para el deporte aficionado.

Al parecer, salir de esa extrema dificultad es lo que menos les interesa a la mayoría de los involucrados, porque conociendo esos dirigentes lo que puede venir, constituye un crimen no estar presto a solucionarlo por cualquier vía, pero nadie quiere ceder un ápice.

Esa crisis es una muestra de como anda la sociedad, donde cualquier pelafustán se convierte en “líder”, sólo por soltar unos pesitos, o donar funditas de arroz y habichuela en campaña.

No es posible que conocedores de los graves y costosos inconvenientes que acechan al deporte, no se arribe a un pacto.

Si esta litis que ensombrece al deporte dominicano se lleva a la Justicia, tal y como ha dicho una de las partes, es seguro que será casi imposible que los atletas dominicanos desfilen con la bandera nacional en los próximos eventos internacionales.

Ello así, porque no es un secreto, que problemas de mucho menos trascendencia, duran años en los tribunales, sin que se evacúe una sentencia definitiva.

La totalidad de los miembros que conforman el Comité Ejecutivo, tanto renunciantes como los que se quedan, saben perfectamente las consecuencias que conlleva llevar un caso de ese tipo de los tribunales, pero les importa un “carajo” lo que ocurra.

Mientras en el Comité Olímpico se destrozan sin piedad, la mayoría de la población está atenta a los resultados de la serie final del béisbol.