Lo cierto es que parecían un sueño las pretensiones del presidente Danilo Medina cuando planteó, en el año 2012, para entonces candidato a la Presidencia de la República en la boleta del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y otras agrupaciones políticas, que la República Dominicana debía atraer a 10 millones de turistas y convertir el turismo en la locomotora de la economía.

Aunque no imposible, sí se trataba de una ardua tarea, porque cada día la casi totalidad de los países del mundo desarrollan campañas de promoción, fundamentadas en buenas estrategias, a fin de ampliar sus destinos turísticos.

El alto nivel de competencia puede observarse en las diferentes ferias que se llevan a cabo a nivel planetario, entre las que destacan las europeas Fitur, España; ITB Berlín, Alemania, y Top Reza, Francia.

Conforme a cifras oficiales de la Organización Mundial del Turismo, en 1950 ese sector movía 2,000 millones de dólares a escala global; mientras que en el año 2000 llegó a los 495,000 millones de dólares y, siguiendo esta curva de aceleración ascendente, en   2015 había alcanzado ya un billón y medio de dólares.

Esto representa el 10 % del Producto Interno Bruto Mundial.

En   2016, más de 1,200 millones de turistas viajaron por el mundo y para el año 2030, se proyecta que se alcance la cifra de los 1.800 millones de personas.

Los esfuerzos desde la Presidencia de la República y del Ministerio de Turismo han dejado resultados positivos, al punto que prácticamente se ha duplicado la llegada de turistas extranjeros en el último lustro.

El incremento de los visitantes no residentes comenzó a palparse para el año 2014, cuando llegaron 4,607.047, pero al concluir  2017, la cifra superó los 6 millones.

A través de un aporte del 8  % al Producto Interno Bruto (PIB) y un crecimiento promedio de un uno por cierto superior al conjunto de la economía, el sector turismo constituye uno de los principales motores económicos de la República Dominicana. Produce más del 25 % de las divisas que genera la economía nacional.

El informe, “Turismo dominicano, un mar de oportunidades”, dice que el flujo de inversión extranjera directa atraída por este sector ha crecido más del 523 % en cinco años y la cartera de crédito otorgada a este ascendió a RD$40,000 millones en 2016. Además genera 332,589 empleados directos, el 8.4 % del total.

Indudablemente que para atraer turistas hay que competir muy fuerte con muchas naciones que también luchan por el mercado.

De hecho, en la recién finalizada Feria Turística de Berlín, República Dominicana obtuvo un segundo lugar entre los expositores de Latinoamérica y el Caribe. En   2014, el país ganó el primer lugar en la misma categoría y en el 2011 en tercero.

Durante la celebración de la edición número 52 edición de la Bolsa Internacional de Turismo en Berlín (ITB) República Dominicana también obtuvo el segundo lugar en la premiación The Golden City Gate por su nuevo video de promoción turístico promocional en Europa, “Me gusta”, el cual fue seleccionado entre 150 representaciones de otros países.

Una mirada retrospectiva, nuestra que ha habido en los últimos cinco años una “Revolución Turística”, que debe ser entendida como el inicio del camino hacia los 10 millones de turistas; que constituye una apuesta a la sanidad económica del país.