Paradigma farmacéutico letal

Paradigma farmacéutico letal

Paradigma farmacéutico letal

Pedro Ángel, director de Resumen de salud.

En la industria de la salud persiste un paradigma letal que excluye abismalmente a terceros actores comerciales.

Funciona así, explicado de forma simple: los medicamentos para tratar y curar enfermedades necesitan de la inapelable prescripción del médico sin que medie la decisión del paciente.

El poder de la prescripción médica le viene a los galenos por los muchos años de estudio y la cuasi condición de ser árbitros entre la vida y la muerte. De sus conocimientos científicos depende la curación o el sepulcro.

La acción de compra inicia con la indicación del galeno a la persona o paciente que busca su mejoría o curación. Este último acude a la farmacia para comprar lo prescrito por el médico, se produce la acción compra.

Así sucede también en la mayoría de los casos de estudios y exámenes que apoyan diagnósticos, equipos especializados y hasta consumo de alimentos específicos.

En ese cuadro, la relación farmacéuticas-médicos es fructífera para ambos actores. El primero porque sus ventas se materializan y el segundo porque lo dota de un gran poder.

Por este paradigma, los presupuestos de mercadeo de las casas comerciales se destinan casi exclusivamente a motivar la indicación de fármacos llamados éticos, que requieren la todopoderosa receta médica.

Los terceros actores no cuentan en esos grandes presupuestos. O cuentan poco. Llámese medios digitales de salud, redes sociales, publicistas, agencias de colocación y otros. ¿Por qué? Simple. Porque el paciente no tiene decisión en la acción de la compra de las marcas.

La industria farmacéutica local mueve anualmente unos 700 millones de dólares, de acuerdo a informaciones de la Asociación Dominicana de Agentes, Representantes y Productores Farmacéuticos (ARAPF).

En el país se estima que las farmacéuticas sobrepasan las 500, entre multinacionales y nacionales.

Para tener una idea de la desigual inversión a terceros del sector, en República Dominicana han surgido más de 10 periódicos digitales de salud y no más de cinco laboratorios farmacéuticos colocan publicidad en todos esos medios.

Una muestra de la efectividad de su inversión, si esas empresas se decidieran a apostar por esos medios, se desprende de inversiones específicas. Explicamos.

En un congreso médico de tres días, las farmacéuticas deben invertir entre 20 mil y 35 mil dólares para tener contacto y ser visualizados por una media de 400 médicos de una o dos especialidades médicas.

Calcule usted: en el país se celebran unos 40 congresos médicos al año, imagine la inversión que hay que hacer para visualizar marcas en diferentes grupos de prescriptores.

Si los laboratorios apostaran 10 mil dólares al año en un medio líder en informaciones médicas y farmacéuticas, serían vistos por al menos un millón de veces por médicos de todas las especialidades, tomando 3 mil visualizaciones diarias, promedio, por los 365 días del año. Una oportunidad enorme a tomar en cuenta en la colocación de presupuestos de mercadeo.

En el último congreso de ARAPF, en noviembre pasado, los disertantes coincidieron en la necesidad de digitalización de procesos y para llegar a más prescriptores con mejor inversión. Las prácticas, sin embargo, dicen lo contrario.

Los próximos años serán decisivos en el cambio de este paradigma fatal.