Los jugadores cubanos brillan en la Liga Dominicana de Béisbol

Los jugadores cubanos brillan en la Liga Dominicana de Béisbol

Los jugadores cubanos brillan en la Liga Dominicana de Béisbol

Juan Mercado

Las actuaciones de los jugadores cubanos en la Liga Dominicana son excepcionales. Sus buenas participaciones aquí se reafirman cada año, llegando incluso a convertirse en columnas importantes para los seis equipos que participan en el torneo dominicano.

En la actualidad sobresalen, por su extensa estadía, los lanzadores Raúl Valdés y Yunesky Maya, quienes con sus labores alcanzan niveles históricos. Valdés, con 18 años de servicios en la Lidom, con Gigantes del Cibao, Leones del Escogido y Toros del Este, y Maya con nueve, divididos entre Escogido, Licey y Águilas Cibaeñas, ya son tratados como nativos.

A los buenos desempeños de Valdés y Maya, se les unen el jardinero/primera base Henry Urrutía y el también lanzador Roenis Elías.

Recuerden que Urrutia fue vital para el segundo campeonato de los Gigantes del Cibao en la temporada pasada y en este torneo se convirtió en el primer cubano en la historia en ganar un título de bateo. También es el primer importado en obtener ese galardón en los últimos 30 años en la Lidom.

Mientras que Elías, en su segunda estadía con las Águilas Cibaeñas, es un verdadero monstruo. En la vuelta regular tuvo marca de 4-0 y efectividad de 0.92. En el round robin sigue impecable con 3-0 y 0.46 de efectividad.
En esta campaña también está por aquí el veterano Yoenis Céspedes, quien ha estado entrando y saliendo con las Águilas Cibaeñas.

Antes que ellos brillaron bastante el inicialista Kendrys Morales y el receptor Brayan Peña, quienes ganaron amplios reconocimientos por sus actuaciones con los Gigantes del Cibao.

También el lanzador Liván Hernández, quien antes de convertirse en un estelar con los Marlins, jugó para los Leones del Escogido.
El listado de peloteros cubanos que ha participado en nuestro torneo de béisbol es extenso y nos alegra que aquí encuentren un nicho para desarrollar sus carreras.