Santo Domingo.-La población debe reflexionar y ayudar a reducir los niveles de desnutrición que aún persisten en la humanidad y el país, que no es responsabilidad del Estado, sino de toda la sociedad.

Ese planteamiento lo hicieron ayer la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED), el Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (Codue) y la Iglesia Episcopal Dominicana junto al Programa Mundial de de Alimentos, en el marco del Día Mundial de la Alimentación.

Citaron que entre los retos que en materia alimentaria tiene que enfrentar el país están un 7 % de desnutrición crónica, baja lactancia materna y la anemia que afecta a las embarazadas, que son una responsabilidad de la sociedad.

El obispo de Puerto Plata, presidente del Área de Pastoral Social de la CED, Julio César Corniel Amaro; el reverendo Julio César Holguín, de la Iglesia Episcopal Dominicana, y el reverendo Fidel Lorenzo Merán, del Codue, junto a William Vigil, representante del Programa Mundial de Alimentos, destacaron los avances y esfuerzos de las autoridades en establecer la Hoja de Ruta Nacional de la República Dominicana, dirigida a eliminar la desnutrición y mejorar la seguridad alimentaria.