Phoenix, Texas.-Las presiones que ejercieron los peloteros latinos para evitar que se impusiera un draft internacional al parecer rindió sus frutos.

En momentos en que se pensó que las negociaciones de un nuevo convenio laboral colectivo entre el sindicato de peloteros y los dueños de equipos empeoraban llegó un rayo de luz al final del túnel: los propietarios habrían renunciado a su exigencia de establecer un draft internacional como condición para el nuevo acuerdo.

El dominicano Nelson Cruz definió como favorable el ambiente para evitar dicho sorteo, ‘pero no se puede asegurar hasta que todo este firmado.

“Estamos en eso, pero estaremos seguro cuando esté firmado”, dijo Cruz, quien participó en la reunión que sostuvieron los jugadores latinos con los ejecutivos del sindicato de peloteros, que dirige Tony Clark.

La polémica

El draft internacional era una condición de los propietarios para el nuevo acuerdo y aunque las partes todavía tienen otros puntos de desacuerdo, este era la clave de los negociadores de, el principal obstáculo para un nuevo acuerdo.

República Dominicana y Venezuela, principales emisores de peloteros extranjeros a Grandes Ligas, cuyo comisionado es Rob Manfred, se opusieron desde el primer momento a la idea del draft, por cuanto se limitarían extraordinariamente las oportunidades para sus jugadores.

Entre 500 y 600 peloteros son firmados anualmente tan sólo en Quisqueya, cifra que bajaría si acaso a un par de centenares, mientras que la cantidad de venezolanos que serían escogidos sería inferior aun.

Draft con historia funesta

Los temores sobre las consecuencias negativas de ese proyecto en el futuro se basan en la inclusión de los peloteros puertorriqueños en el draft amateur en 1990.

Poco a poco se fue secando la copiosa fuente de jugadores boricuas, con su consecuencia también en la liga doméstica, aunque el proceso parece haber comenzado a revertirse en los últimos dos años.

Mañana expira en el actual convenio laboral colectivo en el béisbol, vigente desde el 2011.

Los dueños hicieron un último intento por presionar en extremo y dijeron que no participarían en las ‘Reuniones de Invierno’, que se llevarán a cabo entre el 4 y el 8 de diciembre en el Gaylord National Resort & Convention Center de Maryland, a menos que hubiese progresos concretos en las negociaciones y al parecer ya los hay.