Las autoridades de Grandes Ligas se hicieron de la “vista gorda” con todas las violaciones que se realizan en el mercado de firmas de prospectos en la República Dominicana y Venezuela con el firme propósito de que se vea que un draft, o sorteo internacional, como la salvación y lo lograron.

Recuerden que en el pasado la MLB trató de imponer el draft y los entrenadores nacionales se enfrentaron a Sandy Alderson, quien era el representante del comisionado en el país, hasta con protestas en las calles.

El plan de la MLB fue tan perfecto que el fenecido entrenador cubano Rudy Santin, quien en principio se oponía al draft, terminó apoyándolo por entender que es la única vía de detener las firmas de jugadores latinos de 13 y 14 años.
Me sorprendió ver a David Ortiz salir a oponerse públicamente al draft internacional, dando muestras fehacientes de que desconoce por completo la barbaridad en que se ha convertido el mercado de firmas de prospectos en el país.

Los abusos llegan a niveles tan altos que hay organizaciones que solo les firman a los entrenadores que les son afines. Conocí un caso de un entrenador que llevó su prospecto a una academia y el niño lució muy bien, pero no le dijeron nada.

Cuando se marchaban se le acercó otro entrenador y le dijo tu novato gustó mucho aquí, pero para firmártelo tienes que pasárselo al entrenador “fulano”. Así sucedió, el entrenador se lo pasó al otro y de inmediato fue firmado.

Por esa razón, la mayoría entrenadores de bajos recursos tienen que pasarles sus peloteros a los que están “pegados”, teniendo que ceder altos porcentajes de su trabajo.

Esa es una de las causas por la que se ven llegar a las Mayores a muchos jugadores de bonos bajos por encima de los que recibieron millones al firmar.

La confabulación es tal que muchos escuchas eligen a cuáles programas visitar. Con el draft todo eso se acabará. Los entrenadores serán tratados iguales, por ende sus prospectos serán evaluados iguales y se acabará el negocio por debajo de la mesa, del que muchos se están beneficiando ahora.