Movida por su voracidad por la soja, China dio un nuevo paso para expandir su control de la producción de Brasil, el mayor exportador del mundo.

Una unidad de la compañía china Shanghai Pengxin Group Co. compró una participación controlante en Fiagril Ltda, productora de biodiesel y comercializadora de soja, por US$286 millones, dijo una persona con conocimiento directo y que pidió que no se revelara su identidad porque los detalles de la transacción no se han difundido.

Se trataría de la primera gran adquisición china de una compañía agrícola en Brasil.

La creciente necesidad china de carne ha impulsado un aumento de la demanda de la oleaginosa, que se tritura para convertirla en forraje.

La soja también se convierte en aceite comestible y en biocombustible. China, el país de mayor consumo de carne porcina, es el principal comprador mundial del grano, y las importaciones del país se han triplicado desde 2005.

La unidad de Shanghai Pengxin, Hunan Dakang Pasture Farming Co Ltd., compró una participación de 57 por ciento de Fiagril por alrededor de 286 millones de dólares.