Hábito de cuervos los liga a la mala crianza

Hábito de cuervos los liga a la mala crianza

Hábito de cuervos los liga a la mala crianza

Santo Domingo.-Entre la generalidad de la gente el cuervo está “desacreditado”.

Es que todo el que quiere enrostrarle a otro una mala crianza de sus hijos, una sobrina o un allegado simplemente advierten que le pagarán mal en el futuro con la frase: “cría cuervos y te sacarán los ojos”.

El dicho significa que sí alguien tolera las rebeldías de sus discípulos se atendrá a las consecuencias de sus malas acciones.

La relación de ese inadecuado comportamiento con el Corvus leucognaphalus, ave endémica de la Española, viene dada según el biólogo Nelson García Marcano, de la Dirección de Biodiversidad y Vida Silvestre, del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, a que al cuervo le gusta agachar cualquier objeto que brille.

“Les encanta trastocar o cambiar de lugar anillos y cuentas de collar, entre otras prendas de valor de quienes los toman de mascotas y ese es un comportamiento generalizado donde hace vida”, comentó García Marcano.

Otras de las teorías que refuerzan la expresión viene probablemente de que en tiempos muy antiguos, y tiene que ver con el comportamiento carroñero de otra especie Corvus corax, en Europa, el más grande de la familia Corvidae, era común que después de las batallas se alimentara de los cadáveres en descomposición.

Extraían ojos

Debido a que los ojos son la parte más blanda de los animales, esto era lo primero que consumían.
Sin embargo, los Corvus leucognaphalus, especie de la Española, goza de otra fama que muchos desconocen y es que son tan inteligentes como el humano.

De ahí que por sus habilidades mostradas está sirviendo incluso como instrumento de investigación.

García Marcano explicó que Alex Kacelnik, un zoólogo de la Universidad de Oxford, estudia el uso de herramientas en los cuervos, que ayuda a entender cómo evoluciona la inteligencia superior.

Características

Se distingue por su pico grueso y ojos rojos o anaranjados, con base de cuello blanco, y por hablar más que las cotorras cuando los enseñan a repetir palabras; también posee un vuelo más directo y elevado que el del cao. Su tamaño es de 48 a 51 centímetros de longitud.