La República Dominicana no figura en la “lista negra” que publicó Estados Unidos sobre un conjunto de países que no hacen lo suficiente para combatir el tráfico de personas. Pero está Haití.

No se trata de un delito común. Conjuntamente con el tráfico de personas se mueve todo un conjunto de delitos, tráfico, asociaciones y negocios turbios. De manera directa, el titular del organismo estadounidense habla de que esa actividad afecta a más de 20 millones de personas en el mundo.

La República Dominicana no está de manera implícita en el informe que acaba de publicar el Departamento de Estado de Estados Unidos. Eso no nos excluye del problema que se enfoca directamente en nuestro vecino. Todo lo contrario. Estamos en el ojo del problema.

Somos vecinos y compartimos una franja fronteriza muy importante con Haití. O sea, si hay tráfico en Haití, en cierta forma los agentes de ese tráfico podrían usar y vulnerar nuestra frontera; y esa situación, altamente comprometedora, debe llevar al gobierno central y todas las autoridades conexas con migración y la frontera a mantenerse vigilantes.