San Juan.-El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, presentó ayer el presupuesto para el año fiscal 2017-2018 que comienza el próximo 1 de julio, el primero en la historia supervisado por una entidad de control federal que, como señaló, garantiza servicios esenciales y el pago de las pensiones.

Rosselló presentó ante la Asamblea Legislativa local, que deberá ratificar el documento durante las próximas semanas, un presupuesto para el nuevo año fiscal (1 de julio a 30 de junio) que asciende a 9.562 millones de dólares, que como resaltó el jefe del Ejecutivo es “realmente balanceado” a diferencia de otros anteriores.

Por encima de lo asignado a diferentes partidas y de la cifra de 9.562 millones de dólares, lo que resalta del documento hecho público hoy es que es el primero en la historia que tuvo que pasar por el filtro de una entidad impuesta por Washington para supervisar al Gobierno de San Juan.

El presupuesto dado a conocer por Rosselló fue remitido el pasado 30 de abril a la Junta de Supervisión Fiscal, entidad que dio el visto bueno.

La Junta de Supervisión Fiscal es una entidad establecida por la Ley para la Supervisión, Administración y Estabilidad Económica de Puerto Rico (Promesa, por sus siglas en inglés), aprobada en junio de 2016 por el Congreso en Washington para afrontar la deuda una vez que el Ejecutivo de San Juan se declaró incapaz de asumir el pago a los acreedores.