Los muchachos no saben que a Bosch le dieron el golpe de estado porque con su programa de gobierno quería cambiar la cultura trujillista, abusadora y criminal de los jefes militares, por una democracia abierta, franca y participativa.

La mayoría de los muchachos desconocen que a Don Juan lo tumbaron a los siete meses porque no dejó que unos empresarios se robaran las propiedades del tirano y su familia. El nuevo gobierno las cuidaba como patrimonio de pueblo dominicano.

Algunos muchachos saben que el golpe a Bosch fue en la madrugada del 24 para el 25 de septiembre. Pero no todos conocen que esa vagabundería política fue ‘enchinchada’ por un par de curas que se inventaron los famosos ‘mítines de reafirmación cristiana’, en los que se acusaba al profesor de comunista.

Por supuesto que todo fue concebido, apoyado, motivado y bendecido por los norteamericanos, que con su política intervencionista llenaron de golpes de estado todos los países latinoamericanos gobernados por demócratas auténticos, como Bosch.

Los muchachos deben saber que todos los militares que componían el estado mayor de las fuerzas armadas del año 1963, bajo el liderazgo del general traidor Elías Wessin, fueron los ejecutores de ese acto anti-histórico, mediante el cual se interrumpió la construcción de la democracia dominicana.

Fue ese golpe, contra el digno Juan Bosch, el causante de todos los devaneos políticos, económicos, culturales y sociales que hemos vivido en los últimos 50 años. Que paguen sus culpas los conjuros que hoy viven y que sean malditos por siempre quienes apoyaron el más rastrero de los actos políticos en la historia republicana reciente.

¡Viva Bosch, ni robó ni mató!

*Cantautor dominicano