Las autoridades de Salud del Gobierno y el Colegio Médico Dominicano volvieron a la mesa del diálogo. De por sí el diálogo resultó positivo para ambas partes, ya que la aprobación de 5 de 8 puntos en discusión constituye un avance significativo.

En el diálogo resultó de importancia capital la atención que ambas partes pusieron a la infraestructura de los hospitales, ya que la inmensa mayoría de los centros médicos del país se encuentran en un tortuoso proceso de reparación.

El plan de remodelación y acondicionamiento ejecutado por la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado ha sobrepasado todos los plazos que originalmente se dieron, lo que ha afectado los servicios públicos de salud.

También se acordó un proceso de equilibrio, en términos salariales, que beneficiará al personal de salud de otros organismos del Estado, como es el caso de los médicos del Instituto Dominicano de Seguros Sociales.

En cuanto a los tres temas pendientes del diálogo, están bajo la responsabilidad de una agenda de seguimiento. Varios de estos quedaron sobre la mesa con el compromiso de que su destino final, para estudio y sugerencias, está en manos de varias comisiones que se crearon.

De todas formas, habrá un verdadero avance cuando se concluya el proceso de reparación de los hospitales sometidos a ese proceso de manera simultánea.

Ojalá cale en la conciencia de los que dirigen el gremio médico y las autoridades de salud que la prioridad son los pacientes.