Santo Domingo.-Con motivo del inicio de la Cuaresma, que comienza con el Miércoles de Ceniza, la comunidad católica realizó ayer actos tradicionales orientados a poner en práctica el espíritu de la abstinencia y el ayuno, en procura de un acercamiento con Dios.

La primera dama Cándida Montilla de Medina encabezó la misa con la finalidad de motivar el recogimiento, el perdón y el cambio que demandan los tiempos de abstinencia.

Durante la homilía, el padre Gerardo Ramírez Paniagua llamó a los presentes a buscar las transformaciones necesarias para hacer el bien.

El religioso recordó que la Cuaresma es, además, tiempo de ofrendar, por lo que llamó a los cristianos a vivirla en el marco de las oraciones, ayunos, limosnas y penitencias.

La Cuaresma es una tradición católica que inicia con el Miércoles de Ceniza y es un período de cuarenta días que culmina con el Domingo de Ramos, que a su vez es el comienzo de la Semana Santa.

La Iglesia católica se prepara hasta llegar a la conmemoración más importante de la historia de la humanidad, que es la muerte y crucifixión de Jesús.

Exhortación del sacerdote

El sacerdote Gerardo Ramírez Paniagua resaltó que “la Cuaresma es una tradición católica que inicia con el Miércoles de Ceniza, un período de cuarenta días, en el cual la Iglesia se prepara hasta llegar a la conmemoración más importante de la historia de la humanidad: la muerte y crucifixión de Jesús”.

Destacó que la Cuaresma es tiempo de penitencia y conversión y arrepentimiento de nuestros pecados, lo cual logramos solo si cambiamos lo necesario para ser cada vez mejores y así poder vivir más cerca de Cristo”.

Ramírez Paniagua exhortó a los servidores del Despacho a trabajar en la obra social que realiza Montilla de Medina, para solucionar las situaciones de dificultad a todos aquellos que lo soliciten.