Santo Domingo.-Usuarios del Metro de Santo Domingo y comunitarios de Villa Mella valoraron ayer como bueno el retiro de los buhoneros de las inmediaciones de la estación Mamá Tingó, arrabalizada por la venta de misceláneas.

El Ayuntamiento Santo Domingo Norte procedió a despejar el entorno, específicamente en la urbanización Marañón, tras las quejas de abandono que registraban las entradas al sistema de transporte masivo, donde algunos vendedores abandonaron ante el anuncio de la municipalidad.

“Lo veo excelente, fui de los que me quejé por eso, ya que los peatones tenían que coger la calle, corriendo el riesgo de que los atropellen, además por la arrabalización de la zona y la inseguridad”, comentó Pedro Rosario, residente en el Residencial María 2000.

Tanto él como otros ciudadanos externaron el deseo de que la medida sea extensiva a otras áreas peatonales no sólo de la parte norte, sino del Distrito Nacional, donde las ocupaciones de las aceras se ha vuelto un mal generalizado.

Un ejemplo de esto es en las inmediaciones de la Nicolás de Ovando con Máximo Gómez, donde munícipes han sido desplazados por completo del área peatonal hasta la San Juan de la Maguana, y debajo del elevado, por haitianos que mantienen un mercado de pulgas permanente.

Otros usuarios se quejan del caos vehicular y la inseguridad.