Santo Domingo.-El ministro de Medio Ambiente, Francisco Domínguez Brito, estimó ayer en 20 % la extensión de tierra que está afectada en Valle Nuevo, principalmente por la agricultura que se ha desarrollado en esta zona protegida.

Este Parque Nacional cuenta con 910 kilómetros cuadrados, de los cuales alrededor de 200 han sido devastados y ya no es zona boscosa como la generalidad del área, especificó.

En ese sentido, el funcionario reiteró que en su mayoría estos terrenos están siendo utilizados para el cultivo de papas y fresas.

“Si esto sigue así Valle Nuevo tendrá una vida muy corta de 10, 15, 20 años o 30 tal vez”, proyectó.

Contrario a moradores de la zona, Domínguez Brito indicó que en este Parque Nacional solo hay dos comunidades pequeñas a cuyos integrantes se les buscará una solución.

Resaltó que buscan involucrar a los nativos en el cuidado del parque como forma alternativa para que dejen la agricultura.

“Básicamente en Valle Nuevo son grandes productores. Siete, ocho o doce productores que manejan grandes recursos millonarios”, subrayó.

Adelantó que concluido el plazo de 120 días para eliminación de la agricultura de la zona, procederán a tomar los controles de lugar con la flora y la fauna existente allí, algunas de las cuales serán sacadas por su amenaza al ecosistema del área, como los conejos.

Asimismo, indicó que no se permitirán nuevos proyectos inmobiliarios y los que se encuentran establecidos tendrán que tener un manejo amigable al medio ambiente y pagar alguna indemnización.

Pasar a los hechos

Para Domínguez Brito es tiempo de pasar de las denuncias a los hechos, ya que existe una crisis de agua que afecta a los dos países que conforman la isla. Estimó que si no se actúa ahora se creará un problema mayor, porque el suministro de agua potable será pírrico y no se dispondrá de ese preciado líquido para irrigar las tierras productivas.

El ministro fue reiterativo en indicar que los ríos se encuentran secos y a esto se añade la penetración del mar, que está afectando las aguas subterráneas.

Otras áreas protegidas

Como forma parte de las cinco prioridades de Medio Ambiente, Domínguez Brito explicó que también están centrados en la recuperación del Parque Nacional Los Haitises y de la Sierra de Bahoruco.

Ambas reservas también han sido afectadas por la producción agrícola y la tala de árboles para la producción de carbón.

En el caso de Los Haitises, explicó que se han creado esquemas de producción donde personas adineradas financian cultivos de pequeños agricultores a quienes utilizan para pintar un problema social, sin embargo, se quedan con las grandes ganancias.

Similar al Consejo de Co-gestión de Valle Nuevo, pretenden implementar una administración para esta zona. De igual forma lamentó la situación en Bahoruco.

“Sierra de Bahorcuo ha sido y sigue siendo amenazada con los cortes ilegales para producir carbón y mucho de este se está yendo a través del lago Azuey hacia Haití”, señaló.

Persecución del carbón

Ante esto, explicó que su gestión se centrará en perseguir la producción de carbón como se hace con la cocaína. Indicó que esto es un problema que se agrava, porque entre un 76 y 80 % de los hogares haitianos lo usa para cocinar.

Y peor aún, ese país solo cuenta con un 2 % de capa boscosa.

“Haití ha agotado su capacidad para suplir sus necesidades para cocinar y no tiene otra alternativa que no sea la República Dominicana”, dijo.