SANTO DOMINGO.- Dadas sus atractivas raíces tubulares con cierta similitud a las patas palmeadas de algunas aves, la anacagüita o anacahuita (Sterculia apetala; Jacq. H.Karst), árbol nacional de Panamá, resalta entre muchas especies del Jardín Botánico Nacional Dr. Rafael María Moscoso.

La planta, oriunda de Centroamérica y Sur América, naturalizada en la isla La Española y las Antillas y que forma parte del jardín japonés, requiere de alta luminosidad para prosperar donde sea plantada.

Entre otros nombres comunes, este árbol de la familia Malvaceae es de zona húmedas, también tiene por nombres comunes camoruco, anacahuita o de Panamá, de donde es autóctona; camajón y camajorú en el caribe colombiano. Este árbol se caracteriza por ser de gran tamaño.

Árbol nacional de Panamá

Particularidades

“Este árbol puede sobrepasar los 60 años de vida y su fruto es comestible, ya sea de forma crudo, cocido o tostado con sabor a maní, mientras que la corteza es usada contra la malaria. Hay que destacar que los pelos que posee dentro de sus frutos producen irritación en la piel”, detalló Pedro Suárez, director del Jardín Botánico Nacional.

El ingeniero agrónomo, significó que la madera es usada en ebanistería, como además, produce pulpa utilizada para elaboración de papel. Dicha especie se reproduce por semillas y por estaca o esquejes.

Suárez significó que en Haití se le atribuyen propiedades pectorales y sus flores las utilizan para calmar la tos. En Guatemala, con sus semillas elaboran una bebida refrescante.

Se trata de una planta melífera por ser productora de polen y néctar para abejas; es usado para sombra en espacios urbanos, mientras en el campo lo toman de barrera rompe vientos, ayuda a la conservación del suelo y control de la erosión.

Sus flores son numerosas y de color amarillo con morado, pocas vistosas; frutos crecen en grupos de 3-5 globos que en su interior presentan pelos urticantes color naranja y semilla grande negro brillante.

vulnerabilidad
De acuerdo con Pedro Suárez, la anacagüita figura en la Lista Roja de la Unión Internacional Para la Conservación de la Naturaleza (UICN, 2024), debido a que está en la categoría de Preocupación Menor (LC).