Santo Domingo.-Generalmente cuando se habla de vacío se suele evocar un recipiente incompleto o sin contenido.

Sin embargo los seres humanos utilizan el término vacío para describir, en ocasiones, una sensación que no logran comprender, que la vida no tiene sentido o razón de ser.

Según Olga María Renville, psicóloga del Centro Psicológicamente, muchas personas describen el vacío existencial como “ese algo que me hace falta pero que no sé lo que es”, y esta sensación suele generarse en procesos de transición en la vida del ser humano, donde termina una etapa e inicia otra.

“En la adolescencia, que es como una carretera en la cual el individuo pasa de la niñez a la adultez, suelen ocurrir muchos cambios de forma simultánea”, dijo. Refiere que hay cambios físicos, psicológicos, emocionales, espirituales y en todas las áreas del desarrollo, ya que el joven comienza a cuestionar y validar la información que ha recibido hasta el momento proveniente de sus padres y maestros e inicia una nueva conceptualización de lo recopilado hasta entonces.

Es por eso que en esta etapa es común tener la sensación de que falta “algo”, llevándoles en ocasiones a sentir confusión.

Es en estos momentos, que el joven, acompañado de una amalgama de emociones junto a la fragilidad que caracteriza la autoestima de los adolescentes, comienza en ocasiones a experimentar lo que podría ser su primera sensación de vacío.

Ellos suelen buscar respuestas en el mundo exterior .