Kansas City.-Para su último partido como comisionado del béisbol, Bud Selig fue capaz de ver el bajo presupuesto de Kansas City Royals competir con los gigantes de alto gasto de San Francisco por el título.

Juego 7 de la Serie Mundial anoche contó con un par de equipos de comodín que ya habían jugado durante la temporada regular. En un final organizado por el club cuyo liga ganado el Juego de Estrellas.

Con gestores capaces de impugnar las llamadas por los árbitros, la decisión final procedente de una habitación repetición lejos del campo.

Todas esas innovaciones vinieron de Selig durante 22 años en el cargo.

Sin embargo, su mayor huella antes de partir en enero puede ser los cambios económicos que ayudó a marcar el comienzo de partido tradicionalista.

“Es nuestro trabajo para ofrecer esperanza y fe y tener el sistema en el que los equipos pueden competir », dijo durante el Juego de las Estrellas FanFest el verano pasado. « No sólo en el tamaño del mercado, pero en lo que hacen.

“  Con la nómina del 19 al mayor en $ 97 millones, de Kansas tuvo la oportunidad de convertirse en el primer equipo de entre la mitad inferior de gastadores para ganar el título desde que los Marlins de 2003. Selig junto a otros forzó la renuncia de Fay Vincent.