BARAHONA.-Rafael Leonidas Felipe Núñez, obispo de la diócesis de esta ciudad, pidió al Ministerio de Salud Pública acudir en auxilio de las zonas inundadas por los lagos Enriquillo y Azuei, antes de que se produzcan brotes de enfermedades.
El prelado católico manifestó que entre las enfermedades que podrían ocasionar esa situación esta la malaria y el cólera.
Otras enfermedades pueden ocurrir a consecuencia de la situación del lago Enriquillo, puntualizó.
El religioso destacó los editoriales que han producido medios nacionales escritos, además de noticias y opiniones de diferentes personas.
Dijo que el espera los resultados de la comisión de senadores que hizo un descenso al lago Enriquillo tenga sus frutos, la cual fue presidida por el presidente del hemiciclo, Reinaldo Pared Pérez.
Además de Pared Pérez, estuvo en la comisión los senadores de Independencia y Bahoruco, Juan Mercedes y Manuel Paula.
Esperamos que Pared Pérez informe bien al presidente Leonel Fernández la situación que ha provocado las inundaciones del lago Enriquillo y el Azuei, dijo en su programa Evangelizando por radio herniquillo.
Felipe Núñez indicó que los habitantes de Boca de Cachón no tienen ahora el medio para sobrevivir, ya que sus predios están anegados.
Dijo que ellos como religiosos están unidos y solidarios con las personas que residen en esa zona por la situación por la cual están atravesando, la cual la definió como difícil.
El prelado católico indicó que las autoridades de Independencia y Bahoruco, en sentido general tienen que tomar parte activa para denunciar esta situación.
Agradezco a Dios que la iglesia diocesana fue la que dio la primera voz que hizo un llamado para denunciar la realidad dolorosa y amenazante del lago Enriquillo, apuntó.
