Santo Domingo.-A las 8:30 de la mañana, Viky es una pequeña de cinco años que tiene problemas congénitos.
Tiene labio leporino, que consiste en una hendidura o separación en el labio superior. Justamente a esa hora fue preparada e ingresada al segundo piso del recién inagurado hospital docente Padre Billini, donde hay más de seis quirófanos con tecnología de punta.
En tanto, Yuli, la madre de la infante, está sentada en una de las sillas del pasillo, con los ojos enrojecidos de llorar por temor de la operación de su pequeña.
Pero ella no estaba sola en ese banco. Junto a ella habían otros que no dejaban de mirar el reloj y la puerta del área de los quirófanos, de donde entraban y salían pacientes ya operados.
Aunque ya fue inaugurado el centro de salud por el presidente Leonel Fernández y el ministro de Salud, Bautista Rojas Gómez, aún no está dando consultas al público en sentido general.
Empero, abrió sus puertas a la Vigésima Jornada Domínico-Americana de Cirugía Plástica Reconstructiva, que realizan anualmente las fundaciones Renacer y de Ayuda Médica a los Niños de América Latina.
Los galenos tenían como meta beneficiar a 250 personas con problemas congénitos de oídos, manos (polidactilia), pies, paladar hendido o de labio leporino, como es el caso de Viky.
Ya son casi las 12:30 del día, uno de los galenos se acercó a Yuli, y antes que el médico dijera una palabra, a ella le rodaron por sus mejillas dos lágrimas. El médico con bata verde esperanza solo le dijo: Todo salió bien, su niña se quedará en recuperación pos operatoria y luego la despacharemos.
De esto hace cuatro días. La pequeña, al igual que otros que fueron operados por distintas malformaciones están citados para hoy donde serán revisados tras varios día de habérseles realizado la cirugía a la que fueron sometidos. Los precios de este tipo de operación a nivel privado ronda entre 60 y 80 mil pesos, sin los médicamentos.
El médico anestesiólogo y presidente de la fundación Renacer, Miguel Cotes, explicó que el equipo de galenos nacionales e internacionales operó de manera gratuita a los cientos de pacientes que fueron evaluados.
También que se les dieron los medicamentos que necesitaban luego de la intervención. Algunos de los pacientes ocuparon algunas de las 120 camas nuevas que está estrenando el centro.
Otros casos
Aunque para los galenos la prioridad son los niños, también los adultos fueron beneficiados con la jornada, ya que fueron evaluadas personas que tienen algún tipo de daño físico adquirido por algunas situaciones (riñas, quemaduras, accidentes de tránsito y otras).
La calle Santomé, en la Zona Colonial, donde está localizado el remozado hospital Padre Billini, estuvo abarrotada de personas que buscaron quedar entre los afortunados para ser evaluados y posteriormente operados.
Cotes destacó que el hospital, para el cual él también labora, siempre brinda apoyo permanente.
El profesional de la medicina dijo que en su caso con el nuevo cambio en el área donde trabaja entiende que aumentará más la demanda de los servicios.
Equipos del hospital son muy buenos
Miguel Cotes también labora en el área de anestesia del hospital, y opinó que allá se cuenta con equipos muy buenos, de primera clase.
Dijo que el hospital tiene máquinas de primera, lámparas con buena iluminación y mesas quirúrgicas excelentes. Aquí encontrará seguridad en los procedimientos y en la calidad humana, porque esto último es lo que más importa dijo.
Cotes, presidente de la Fundación Renacer, explicó que la jornada concluyó ayer. No obstante, esta semana estarán revisando las operaciones realizadas.