Cañadas y barrios inundados mantuvieron en vilo a la gente

Cañadas y barrios inundados mantuvieron en vilo a la gente

Cañadas y barrios inundados mantuvieron en vilo a la gente

En la cañada de Guajimía los vecinos estaban al acecho ante la posibilidad de que se desbordara por bloqueo de plásticos. FOTOS GUILLERMO BURGOS

SANTO DOMINGO.-Las torrenciales y persistentes lluvias que acarreó la tormenta tropical Franklin, mantuvieron en vilo a la gente y pusieron en evidencia una vez más, la ausencia de un sistema de desagüe eficiente en diversos puntos crítico del Gran Santo Domingo.

Especialmente en las zonas periféricas, se evidenció de nuevo algunos sectores quedaron anegados por completo, teniendo en algunos casos la gente que abandonar sus viviendas y se puso a prueba, incluso el uso de botes, para movilizarse por parte de jóvenes.

Entornos como la cañadas de Guajimía, en la Prolongación 27 de Febrero, en Santo Domingo Oeste, la gente permanecía al acecho ante la posibilidad del desbordamiento de esta, la cual lucia desde el mediodía de ayer atascada de plásticos.

En Los Ríos gran parte de los colmados lucían surtidos y abrieron como un día normal.

“Por aquí por la Francisco Caamaño todas las viviendas están inundadas, está nadando la gente full; este proyecto de Guajimía tiene 18 años y jamás han vuelto hacer nada”, comentó Ángel Antonio Vásquez, residente del sector Iván Guzmán.

Zonas como cañada Las 800 en Los Ríos también se desbordó, y sus residentes atentos, rememorando el desastre del 4 de noviembre del 2022 provocó muerte, desplomó casas y arrastró gran cantidad de vehículos y enseres de las familias. La generalidad espera concluyan los trabajos iniciados.

“Hasta el momento no han ocurrido hechos lamentables, sentimos un poco de preocupación, hemos visto la Defensa Civil y la Cruz Roja, esperamos que concluyan los trabajos iniciados porque hay mejoras que podrían derrumbarse”, comentó Radhamés Mesa, comunitario.

Dijo que realizan un levantamiento para conocer la situación real de las familias.
Zonas céntricas
En la Capital, grandes avenidas como la Luperón, 27 de Febrero, la Anacaona, el malecón en distintos tramos, estaban intransitables, y calles secundarias de residenciales, exclusivos como Los Cacicazgos. Igual situación se vivió en el sector El Rosmil y en la avenida La Vega Real de Arroyo Hondo.

Los delíveris ofrecieron sus servicios en medio de lluvias.

En sectores como el ensanche La Fe se derribaron algunos árboles de laurel que lucían enfermos, y en otros casos se derribaron cables del tendido eléctrico. El desnivel de la Plaza de la Bandera tuvo que ser bloqueado para evitar que vehículos quedaran atrapados al intentar pasar.

Negocios
Grandes cadenas de supermercados como Bravo y Nacional abrieron sus puertas al público, como parte de su responsabilidad social, aunque el flujo de clientes era mínimo, no solo porque el día fue declarado no laborable, sino porque la mayoría permanecía en sus hogares ante el paso del mal tiempo.

No obstante, en barrios de la parte alta, la mayoría de los colmados se mantuvieron brindando servicio y la gente acudió en busca de provisiones. Igual hubo gente que aprovechó la ocasión, como es habitual, para darse su “petacazo” de cerveza y ron.

Insensatos, específicamente niños y jóvenes se bañaban en grandes laguna que se formaron, y se agenciaban algunos pesos empujando vehículos a los que se les apagaba el motor.

Alcaldías estuvieron presentes en barrios
Ayudas. Las alcaldías se mantuvieron activas en las calles, dando apoyo a las familias afectadas y supervisando los daños que ocasionaban las lluvias.

Carolina Mejía del Distrito Nacional y Manuel Jiménez, de Santo Domingo Este, fueron vistos ataviados con sus capas amarillas recorriendo diversos sectores acercándoseles a la gente en sectores como Villa Juana, Los Guandules, La Ciénega, El Caliche de Los Ríos, Los Girasoles Primero y Las 800.

En este último lugar, Carolina Mejía conversó con residentes y líderes comunitarios para escuchar sus necesidades y brindarles apoyo. Manuel Jiménez también se presentó en la avenida Barceló donde se registró un derrumbe en la madrugada de ayer que obligó al cierre, y afectó un tendido eléctrico.