En los V Juegos Escolares Nacionales de San Juan de la Maguana 2012, se vio  a muchos talentos de variadas disciplinas que dan una idea de cuánto puede proyectarse el deporte dominicano si se les da seguimiento.

Quienes vieron el baloncesto de ambas ramas pudieron apreciar a habilidosos escoltas, buen manejadores de balón, tiradores de distancias muy eficaces (una carencia nacional) y delanteros muy altos con agilidad, pero que deben ser trabajados por lo mejor de nuestros técnicos.

Lo mismo se vio en voleibol, béisbol (obvio), deportes individuales como atletismo, boxeo y tenis de mesa.

Es probable, casi seguro, que muchos de esos muchachos ya forman parte de alguna estructura de su deporte (club, asociación o federación misma) y no precisamente como parte de un sistema estructurado desde la escuela, como hacen las naciones que planifican, y por tal, se han desarrollado en el deporte.

A partir de esta experiencia, se impone sin dilación un cambio en el sistema deportivo nacional, con la estructuración de un plan que lleve consigo la instalación de centros regionales para albergar los talentos que deberán surgir del sistema escolar.