El rito anual de los Medias Rojas de Boston de estar debatiendo el contrato con el dominicano David Ortiz no ha surgido esta temporada y por buenas razones.
Él estará recibiendo el mayor dinero en su carrera en el año 2015, al devengar US$16 millones, con la oportunidad de recibir US$20 millones en 2016 y 2017, a través de opciones que tiene el equipo.
Y la única razón por la discusión arraigó cuando sentado en el dugout antes del partido de los Red Sox del sábado contra los Reales era porque la producción de Ortiz en esta temporada ofrece una hipótesis interesante: ¿qué pasaría si él y Boston no hubiesen llegado a un acuerdo?
Mientras que ser calificado como el jugador más valioso en un club de último lugar es similar a vivir la vida como el máximo anotador del equipo de fútbol más bajo del ranking de la FIFA (que sería San Marino), cuando se trata de los Medias Rojas sin la presencia de Ortiz, ‘sería un mundo notablemente más aterrador’.
Hasta hace poco, Ortiz estaba en camino a una temporada histórica, que podría haber concluido como el líder de empujadas en la Liga Americana a pesar de jugar en el equipo con menos carreras anotadas. Tiene 99 empujadas y 32 jonrones en 138 juegos.
