En los últimos días de diciembre frecuentemente pensamos en lo que hicimos o no en el tiempo anterior y hacemos planes a futuro acerca de los propósitos que queremos lograr o de lo que no alcanzamos a realizar en los tiempos anteriores.

Comparto con los lectores de este diario y de esta columna, algunas de mis personales reflexiones y agradecimientos. Qué más quisiera que les sirva a algunos.

Quiero comenzar agradeciendo estar viva y tener familia y amigos con quienes celebrar la vida y las ocasiones.

Agradecida de todas las oportunidades que se me han presentado y se me presentan sin importar que las aprovechara o no, pues si las llegué a aprovechar están dando sus frutos de alguna manera, y si no, no era el momento.

Agradecida de los que han hecho posible mi comunicación semanal por esta vía y de los lectores de este diario, esta columna y de los conocimientos adquiridos que me permiten los aportes que haya podido hacer a través de ella.

En fin, agradecida de todo, pues si enumero todo por lo que tengo que agradecer, el periódico entero no me es suficiente.

En mis reflexiones decido solo mirar hacia atrás para tomar experiencia, no repetir lo que no me ha dado el resultado deseado; amar sin condiciones ni expectativas; no crearme necesidades; tener deseos y propósitos, no metas, ya que el futuro es incierto, no depende de nosotros, necesariamente, sino de las circunstancias y de otros. Clave: amor, armonía y equilibrio.

Redes : @AmalfisNunez