El equipaje del líder para el nuevo año

El equipaje del líder para el nuevo año

El equipaje del líder para el nuevo año

Con 2018 a la vuelta de la esquina, muchas personas se están enfocando intensamente en plantearse metas y propósitos para lograr un progreso significativo en sus resultados y los de sus equipos con relación a los de 2017.

Si preguntáramos quién desea lograr todas sus metas para este nuevo año, es seguro que todos contestaríamos afirmativamente.

Ahora bien, la pregunta debe ser: ¿quién está dispuesto a hacer lo que hay que hacer para lograrlas?

Es seguro que algunos lo lograrán y que muchos en el mejor de los casos tendrán resultados satisfactorios y otros se conformarán con el cansancio del trabajo.

Al sentir las brisas navideñas aflorar todos nuestros mejores sentimientos se aprestan a darnos el bienestar de querer lograrlo todo, sin embargo, lo ideal es declarar: ¡este es mi año! Y voy a lograr todas mis metas: ¡voy a bajar de peso! ¡Mejoraré mis relaciones personales!

¡Mi equipo este año logrará los números! ¡Voy a conocer mi país!, y todos los sueños guardados en lo más profundo de nuestro ser.

Lo peor de todo esto es que se quedan en expresiones sinceras, pues según los estudios las mismas serán olvidadas en la tercera semana de enero, porque la emoción es el único recurso con el que se formulan todos estos proyectos y la verdad es que sin un calendario cuidadosamente elaborado, que los apoye para lograrlos, sus posibilidades de alcanzarlos serán escasas o imposibles.

Cada año vivimos ese mismo episodio y es que como dice mi mentor John C.Maxwell: “El crecimiento no ocurre por sí solo”, esperar mayores resultados haciendo lo mismo o con el mismo nivel de crecimiento es definido una locura. No basta con querer, vas a tener que hacer ajustes, convertir palabras en acciones para lograrlo.

¿Será retador?

¿Será retador? Sí, somos el resultado de una cultura de soñar sin accionar en la dirección de los sueños. La buena noticia es que todo eso puede cambiar si asumimos la responsabilidad de iniciar un proceso de transformación en la cultura del hacer día a día en nuestra agenda diaria.

Este es un buen momento para hacer las cosas de forma diferente y de prepararnos para enfrentar la batalla diaria que vivimos frente a nuestros hábitos, que muchas veces pasamos incluso de generación a generación.

Es el momento de que empecemos por crear una cultura de excelencia y para ello establezcamos una verdadera estrategia para el éxito que debe incluir un calendario de capacitación, entre otras cosas para impulsar esa transformación cultural.

Motor de energía

Este esfuerzo debe hacerse intencionalmente, debe ser un motor de energía que te mueva durante todo el año.

Elaborar un programa para el año 2018 debe ser una tarea importante a desarrollar en lo que queda de diciembre y en los primeros 15 días de enero, luego de ahí las fuerzas y el entusiasmo empiezan a disminuir y la inercia de lo cotidiano nos gana la batalla sin ni siquiera haber empezado.

Escribe tus metas.

Debes crear un tema y título que represente tus objetivos, es decir, lo que deseas lograr. Esto es determinante para que no pases un año ocupado y al final te des cuenta que no lograste lo esperado.
Dónde crecer.

En este paso debes enfocarte en identificar dónde te encuentras y en qué áreas debes crecer para lograr tu máximo potencial. Capacitarte en lo que sea relevante y dirigido al objetivo de tu año.
Equipo.

Del mismo modo que elegiste el tema y capacitarte, debes escoger las personas que estarán a tu lado, porque tus resultados serán impactados por los miembros de tu equipo.

Acciones.

Debes saber qué hay que hacer y hacerlo. Puedes elaborar una lista.

*Por Ginny Jacobo



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