SANTO DOMINGO.- Un descendiente de uno de los expedicionarios del 14 de junio de 1959, un historiador y un compañero de lucha de Manolo Tavárez calificaron ayer como una vergüenza y una ofensa a la memoria histórica las afirmaciones de la hija del dictador Rafael Trujillo Molina sobre el crimen de las hermanas Mirabal.

Porfirio Rodríguez, nieto del legendario expedicionario Juancito Rodríguez, el historiador José Antinoe Fiallo y el veterano revolucionario Fidelio Despradel, compañero de armas de Manolo Tavárez, consideraron que la intención de la hija del hombre que encabezó la sangrienta dictadura de 1930 a 1961, es edulcorar la figura de su padre, tergiversar la historia y burlarse de la inteligencia del pueblo dominicano.

Hiere memoria histórica
 “Hiere la dignidad, la vergüenza y la memoria histórica que una muchacha de triste recordación para el país, como lo es Angelita Trujillo, que fue una  persona sifrina y superficial, cómplice de un horrendo crimen que nunca se ha aclarado,  como hacer abortar a una muchacha por problemas de celos, una consentida y beneficiaria de toda esa historia vergonzosa y deleznable, de ese crimen y ese despojo que hizo el tirano al país, tenga el desparpajo de decir a los dominicanos que su padre no  mandó a matar a las Mirabal, sino Pupo Román”, dijo Rodríguez, presidente de la Fundación Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo.

Rodríguez consideró como sospechosa y desvergonzada la promoción que se le ha dado al libro “Trujillo, mi padre: en mis memorias”,   en el cual hace una apología de un régimen de su padre. 

Objeta afirmación
 Porfirio Rodríguez señaló que la   supuesta participación de Segundo Imbert y Amiama Tió en  el crimen de las Mirabal fue un invento de Johnny Abbes, el jefe de Inteligencia del régimen, para tratar de desacreditarlos.

Angelita ha hallado fértil terreno
A juicio de Fidelio Despradel, el hecho de que  organizaciones que en su momento fueron de avanzada como  el PLD y el PRD abjuraran de sus principios y se hayan convertido en instrumentos de los más atrasados, constituye un terreno fértil para las intenciones de  Trujillo de edulcorar la figura del tirano.

“El terreno fértil es el desastre que están construyendo estos gobiernos y éste (el actual) en particular, ese es el terreno fértil para que Angelita venga a hablar todo eso”, dijo Despradel.