SANTO DOMINGO ESTE.-Los chinos han invadido el sector Invivienda, donde han instalado diez negocios en menos de un kilómetro, desde la avenida Charles De Gaulle hasta el parque.
En este barrio de clase media, los orientales se han vuelto muy populares y están hasta en la sopa.
Son propietarios de una joyería, donde también hay un estudio fotográfico, papelería, venta de repuesto y accesorios para cámaras, fotocopiadora, envío de fax y una importadora de ropa y accesorios.
También, tienen una ferretería, tres centro de uñas y un supermercado.
Pero lo que ha hecho famosos a estos incansables asiáticos son los pica-pollo, de los cuales han abierto cuatro, incluido dos que están uno al lado del otro, en la avenida Simón Orozco, la principal de Invivienda.
Algunos de estos negocios tienen ya más de 15 años operando y cuentan con una buena afluencia de clientes.
Gracias a los bajos precios a que ofrecen buena cantidad de carnes, los pica-pollo chinos son muy frecuentados por los vecinos de Invivienda y otros barrios aledaños.
El precio de un pica-pollo varía desde RD$90 si es de tres piezas, hasta RD$150. Pero aquellos que no tienen suficiente dinero pueden comprar un Chofán pequeño desde RD$20.
Personas consultadas expresaron que les gusta comprar en los pica-pollo de los chinos porque son más económico y tienen buen sabor.
Igualmente, en la joyería, los centros de uñas y la tienda de ropa y accesorios, algunos clientes indicaron que los producto que allí se expenden están a precios más competitivos.
Trabajadores haitianos y dominicanos
Es notoria la cantidad de empleados haitianos que trabajan en los negocios propiedad de los chinos, sobre en los pica-pollo.
Pero en los centros de uñas suelen tener como empleadas a mujeres dominicanas. En el súper mercado hay hombres y mujeres dominicanos.
Bárbara David, una haitiana que tiene un año trabajando en el pica-pollo Invivienda, dijo que gana un salario de RD$2 mil quincenales, y el tratamiento que les dan sus patronos a los empleados es buena.
Por el contrario, varios empleados dominicanos dijeron que el trato que les dan los chinos no es bueno, y que el sueldo que les pagan es muy bajo.
Asimismo, denunciaron los chinos de Invivienda despiden a sus trabajadores cada tres meses para no pagarles sus prestaciones laborales.
Hermetismo
Los esfuerzos por conseguir una entrevista con algún chino propietario o empleado de uno de los tantos negocios que operan en Invivienda fueron infructuosos.
Los orientales, que se caracterizan por estar atentos a todos los detalles de su negocio, rehúyen hablar con la prensa, y simulan no entender el español para no ofrecer detalles, y en ocasiones prefieren hablar en su idioma con algún compatriota. Incluso se niegan a ofrecer sus nombres.
El único que accedió a hablar con esta periodista, fue el encargado del pica-pollo Invivienda, quien sin embargo se negó a identificarse.
Cuando le preguntamos por qué decidió instalar su negocio en este sector, se limitó a responder con picardía , polque aquí hay mujeles muy bonitas.
