SANTO DOMINGO.-Motivada por su gran talento natural, deseos de superación y el éxito de su familia en la halterofilia, la joven Mildre Leguísamo confía en forjarse un promisorio destino en el exigente deporte de las pesas. Leguísamo, con 23 años de edad, tiene razones de sobra para apostar a una carrera promisoria.

Primero, nació en San Pedro de Macorís, la provincia que más pesistas exitosos ha aportado al país.

Segundo, es hija de Guillermina Candelario, subcampeona Panamericana y Centroamericana.

Tercero, prima de Beatriz Pirón, monarca Centroamericana y en Juegos Panamericanos Junior.

Candelario, brillante en este deporte, es tía de Pirón, por lo que los genes de Leguísamo apuntan hacia el estrellato en el exigente deporte del levantamiento de pesas. Con semejante linaje y entusiasmo, Mildre se lanza tras la estelaridad en el equipo nacional, tal como lo hizo su madre Guillermina y lo hace actualmente su prima Beatriz.

Leguísamo compite en los 58 kg, tiene un año como integrante de la selección nacional de pesas y ya ha empezado a mostrar su talento tanto en el país como en eventos internacionales.

Mildre porta en su colección sendas medallas de oro en Juegos Juveniles y Militares. “Estoy orgullosa de poder dar continuidad a lo que ha sido mi familia en las pesas, o sea una tradición”, señala Leguísamo, quien aseguró que trabaja para tener un exitoso ciclo olímpico representando al país en los venideros Juegos Centroamericanos, Panamericanos y Olímpicos.

“Sé que hay mucho trabajo por delante, pero entrenando fuerte y con disciplina todo se puede”, dijo. “Trataré de ser tan buena o mejor que mi mamá y mi prima, y tratar de tener un buen ciclo olímpico, que me impulse hasta los Juegos de Tokio 2020”, dijo la atleta.

Cómo inició todo

Mildre nació, creció y se desarrolló en un ambiente ligado a las pesas. Su madre Guillermina Candelario fue quien la llevó al gimnasio por primera vez.

Empezó a entrenar pesas a los 12 años, luego se alejó por breve tiempo, pero su progenitora insistió hasta que la hizo regresar.

“Desde muy pequeña veía a mi mamá Guillermina cuando iba y venía del gimnasio en San Pedro de Macorís y eso fue despertando mi curiosidad por las pesas”, señaló Leguísamo. “También me motivó lo exitosa y famosa que llegó a ser en las pesas”.

Candelario y Pirón

Su mamá (Guillermina, 48 kg) ganó cinco medallas de bronce y dos plata en Juegos Panamericanos y Centroamericanos.

Incluyendo una plata en los Panam Santo Domingo 2003 y otra en Centroamericanos y del Caribe Mayagüez 2010.

Su prima (Pirón, 48 kg) logró tres oro en Campeonatos Panamericanos Junior 2015 en Cartagena, Oro y plata en los Centroamericanos Veracruz, bronce en los Panam Toronto 2015 y oro en Panam Juveniles de 2011 en Isla Margarita, Venezuela, en los 44 kilos.