Santo Domingo.-De “abusivo”, “estafa”, “absurdo” y   “muy malo”  calificaron ayer diversas personas el proyecto de ley que busca gravar con RD$20.00 los teléfonos post pagados o con facturación, que daría soporte al servicio de emergencias 911.

De aprobarse la disposición, el gobierno recaudaría por este concepto al menos 384 millones de pesos.

“Si el Gobierno quiere impulsar su Plan de Seguridad, que asuma el costo, que estamos cansados de cargar con tantos impuestos, eso es abusivo”, enfatizó Aurora Mejía, residente en el ensanche Luperón.

Julio Reyes, presidente de Corazones Realty, en la 27 de Febrero, entiende que son las compañías telefónicas las que deberían apoyar esa iniciativa, porque cada vez que se va a instrumentar un plan que requiera recursos tiene que salir de la población.

 Domingo Páez, residente en Haina, también definió  el plan como una “estafa”. Otros insistieron en que ese servicio es gratis en los demás países y las telefónicas, a su entender,   deberían hacer ese aporte en base a sus ganancias. 

Un reducido grupo grupo favoreció la idea, como Lourdes Carderón, del ensanche Naco;   María Polanco, de Los Ríos, y  Rafael Paulino, de Alma Rosa II, siempre que sea efectivo el servicio.

Diputados adelantan votarán en contra plan

Los diputados Ramón Cabrera y Tulio Jiménez  afirmaron que ese impuesto no puede ser aplicado en estos momentos y que el mismo debió de estar contemplado en la actual reforma, por lo que no lo apoyarán. 

El vocero  del PLD, Gustavo Sánchez,  rechazó la pieza y dijo que el tema hay que discutirlo.

Mientras que el reformista Máximo Castro Silverio sostiene que la población está hastiada de impuestos. El presidente de la Comisión Interior y Policía de la Cámara Baja, Elpidio Báez, justifica el cobro del gravamen.