La prostatitis impacta la calidad de vida del hombre e implica costos significativos

La prostatitis impacta la calidad de vida del hombre e implica costos significativos

La prostatitis impacta la calidad de vida del hombre e implica costos significativos

En este país la prevalencia de casos oscila entre un 10 y un 20%, y en otros países se manejan números similares o menores.

SANTO DOMINGO.-La prostatitis es la inflamación de la glándula prostática que envuelve un grupo de desórdenes. Pudiera clasificarse en base a la presencia de un microorganismo patógeno de su tiempo de evolución y de sus síntomas, principalmente en cuatros grupos como la prostatitis bacteriana aguda y la bacteriana crónica, así como la prostatitis crónica asociada a síndrome de dolor pélvico crónico y la prostatitis inflamatoria asintomática.

Según la cirujana uróloga Mei-Lin Joa, las principales causas asociadas a la prostatitis son el E coli, el microorganismo causante de la gonorrea y la pseudomonas, y estadísticamente se estima que aproximadamente un 50 % de los hombres presentarán síntomas asociados a la prostatitis en algún momento de sus vidas, enfatizando que pudiera originarse a partir de afecciones previas en la uretra, pues los pacientes con uretritis causadas por bacterias, corren el riesgo de la infección de la próstata.

Manifiesta que la prostatitis es una condición que afecta la calidad de vida del hombre, a esta se atribuyen connotaciones enormes en cuanto a costos significativos para el sistema de salud, principalmente por los gastos farmacéuticos que conlleva a la población afectada, así como también los gastos de hospitalización de los casos que son más severos y debido a los síntomas que presenta la condición es que los pacientes se ven afectados tanto física como psicológicamente ocasionando un grado de ansiedad y depresión.

La doctora Joa, miembro del Grupo Multidisciplinario Urus, destaca que para prevenir esta afección se recomienda evitar las infecciones del tracto genitourinario, poniendo como ejemplo el mantener relaciones sexuales protegidas y que sean de bajo riesgo, orinar después de las relaciones sexuales, evitar prolongar o retener la eyaculación, limitar el consumo de alcohol y tabaco, evitar los traumatismos repetidos en la zona pélvica, como montar motor, bicicleta o caballo y también se recomienda ejercitarse y mantener una buena alimentación e hidratación y controlar el estrés teniendo un descanso adecuado.

Tipos de prostatitis
Con relación a la sintomatología refiere que todo va a depender del tipo de prostatitis, ya que en la aguda se encontrará la presencia de bacterias en el urocultivo y puede causar síntomas genitourinarios y pélvicos en la dificultad para orinar, disuria o ardor, dolor suprapúvico, perineal o rectal, urgencia urinaria que es como la necesidad imperante de ir a orinar, también sensación de vaciamiento incompleta, otros de los síntomas de los casos más severos de una prostatitis aguda pudiera ser fiebre, vómito, malestar general, retención aguda de orina y sexis.

Mientras que en la prostatitis crónica los síntomas pueden ser similares, pero se presentan de forma más leves, de hecho intermitentes y tiene que presentarse para clasificarse como crónica por lo menos por tres meses, aun con persistencia del patógeno tanto en el urocultivo como el cultivo del semen.

Mei-Lin Joa

En el caso del síndrome de dolor pélvico crónico, es una prostatitis crónica donde se presenta los síntomas por más de tres meses, sin presencia necesariamente de un patógeno en los cultiuvos, y en estos casos se pueden incluir síntomas de disfunción sexual y en la prostatitis que es inflamatoria asintomática, el diagnostico se hace de forma incidental que se refiere a que no necesariamente buscando diagnosticar este tipo de patología, sino que el paciente se da cuenta porque encuentran datos inflamatorios de la próstata durante evaluaciones por temas de infertilidad o por sospecha de cáncer de próstata.

Manejo

— Cómo se trata
Explicó que la línea de tratamiento en los casos agudos y crónicos se recomienda un manejo con antibióticos y para las molestias antiinflamatorios y en los casos de dolor pélvico crónico se ha utilizado la fisioterapia, entre otros.



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