Con los ingredientes habituales del flan y un poco de fruta o jugo de piña se cocina un delicioso y original postre. Presentamos sus dos versiones más sencillas: con y sin horno.
De vainilla o de huevo suelen ser la mayoría de flanes que se preparan en muchas cocinas. Sin embargo, siempre es posible incorporar ingredientes sorpresa, como por ejemplo la fruta que se añade a un flan de piña.
Este es un postre sencillo de preparar en el que es posible usar la fruta fresca, en almíbar o en su jugo. El resultado final es un dulce delicioso, cremoso y ligero que gusta a toda la familia.
El flan de piña
Sin duda alguna, el flan es uno de los postres más tradicionales y clásicos de la tradición repostera. En su receta básica se combinan la leche, el azúcar y los huevos con el caramelo que aporta un toque especial de color.
Sin embargo, en ocasiones se puede ampliar el abanico de posibilidades e introducir variaciones en la preparación. Mezclar frutas en su base u otros sabores, como chocolate o queso, son algunas de ellas.
El flan de piña se obtiene al incorporar esta fruta entre los ingredientes. Y es muy interesante cocinar con ella, pues es un producto ligero, con buen aporte de vitamina C y fibra.
Además, contiene enzimas que facilitan la digestión y, según aclaran estudios científicos, puede repercutir en otras acciones del organismo, como la coagulación de la sangre, los procesos inflamatorios y la absorción de medicamentos.
Se puede preparar sola, en forma de batido, en una tarta o en un flan, como en las dos recetas que se presentan a continuación.
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1. Flan de piña en horno
Este postre es sabroso y fácil de preparar. Con la decoración final resulta muy original y atractivo.
Ingredientes necesarios para un flan de 8 raciones
- Leche evaporada: una lata.
- 1 lata de leche condensada azucarada.
- Jugo de piña: 1 taza.
- 5 huevos.
- 1/2 taza de azúcar.
- 1 cucharada de esencia o extracto de piña.
- 1 taza y media de azúcar para elaborar el caramelo.
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Paso a paso
- Antes de encender el horno para que se caliente a 180 grados centígrados hay que preparar un molde para cocer al baño maría.
- Primero comenzar por la preparación del caramelo. Verter el azúcar en una cacerola a fuego medio. No es necesario remover mucho, pero es preciso observar con el fin de que no se queme. Al empezar a diluirse adquiere un color dorado; ahora es el momento de retirar del fuego. Se ha de evitar que llegue a un color muy oscuro, ya que de este modo adquiere sabor amargo.
- A continuación verter el caramelo en el molde e ir moviendo para que cubra toda la superficie del fondo y las paredes. Es necesario ser cuidadoso para no quemarse, pues la temperatura del azúcar es elevada.
- Para preparar el flan verter la leche condensada, la leche evaporada, el jugo de piña, los huevos, la media taza de azúcar y la esencia de piña en un vaso de licuadora o batidora. Mezclar hasta que todo queda integrado y colar.
- Verter la masa del flan en el molde y colocar para cocer al baño maría. Después introducir en el horno y dejarlo durante 1 hora.
- Pasado el tiempo, dejar enfriar a temperatura ambiente y reservar en la nevera hasta el momento de servir.
- 1/2 taza de azúcar.
- 2 cucharadas de agua.
- 1 cucharada de jugo de limón.
- 5 rodajas de piña en almíbar, enteras.
- 1 taza y 1/2 de piña en almíbar.
- 6 huevos.
- 1 taza de leche.
- 1 cucharada de esencia de vainilla.
Este flan de piña queda muy bien decorado con nata batida y una cereza confitada. Pero esta fruta combina a la perfección con otros ingredientes, por lo que también es posible espolvorearlo con canela en polvo o coco rallado.
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2. Flan de piña sin horno
La segunda propuesta de flan de piña es un poco diferente, ya que para su elaboración no es preciso el uso del horno. Una opción en la que resalta el intenso sabor a fruta y su textura cremosa.
Ingredientes a utilizar para 8 raciones
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Pasos a seguir en la elaboración del flan de piña sin horno
- Colocar una sartén a fuego medio e incorporar el azúcar, el agua y el jugo de limón. Cuando empieza a aparecer un color dorado, retirar del fuego. Es necesario estar bien alerta, ya que de lo contrario el azúcar puede quemarse con facilidad y adquirir sabor fuerte y amargo.
- Acto seguido, verter el caramelo en un molde redondo y mover con el fin de que cubra toda la superficie de la base.
- Colocar las rodajas de piña enteras en el fondo del molde.
- Por otro lado, licuar el resto de la piña, la leche, los huevos, la esencia de vainilla y también la leche condensada. Cuando está todo integrado, verter en el molde y después tapar con papel de aluminio.
- Para cocer el flan, introducirlo en una olla grande y echar agua hirviendo hasta llegar a la mitad de la altura del molde.
- Tapar y dejar hervir a fuego bajo durante 1 hora. Pasado el tiempo, retirar con cuidado y dejar enfriar por completo antes de desmoldar.
Un postre para ocasiones especiales
El uso de piña natural o en almíbar es indistinto, si bien siempre es preferible optar por la primera, ya que se trata de su forma natural. Aunque en este caso es un poco más difícil y laborioso de pelar.
Para darle un aroma extra es posible infusionar la leche con una vaina de vainilla, una rama de canela, unos granos de cardamomo o un poco de corteza de naranja o limón.
Este flan de piña se puede preparar en un molde entero (redondo o alargado) o en pequeños vasitos individuales. En este caso es necesario untar de caramelo la base y los lados de cada uno de ellos.
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Para comprobar si el flan está hecho hay que introducir una aguja en el centro. Si sale limpia ya está en el punto de cocción perfecto. De lo contrario, dejar cocer 5 minutos más.
Aunque en su elaboración está presente la fruta, el flan de piña sigue siendo un postre con una alta presencia de azúcar añadido.Es por ello que la mejor recomendación nutricional es reservarlo para comer de forma esporádica o en ocasiones especiales.Nota Cortesía del portal : Mejor con Salud