«A diario una manzana es cosa sana», es la traducción de un antiguo dicho en inglés que promovía la creencia popular sobre los beneficios de esta fruta.
Ahora, los recientes resultados de un estudio científico sustentan esa teoría y van más allá: consumir productos como manzanas, ricos en flavonoides, protegen contra el cáncer y la enfermedad cardiovascular, según la Universidad Edith Cowan, de Australia (ECU).
¿Qué son los flavonoides y cuáles son sus beneficios?
Los flavonoides son un grupo diverso de fitonutrientes (químicos vegetales) que se encuentran en muchas frutas, verduras y especias, según lo define el sitio especializado LiveScience.
Son en parte responsables de los intensos colores de las frutas y verduras y hay hasta 6.000 tipos de flavonoides.
En años recientes, los científicos han apuntado a varios tipos de flavonoides como factores en los beneficios a la salud de tener dietas ricas en frutas y vegetales.
Al igual que otros fitonutrientes, los flavonoides son poderosos antioxidantes, con características antiinflamatorias que asisten al sistema inmunológico.
Históricamente se han utilizado en la medicina tradicional china para la protección cutánea, mejorar la función cerebral y regular la presión arterial y el azúcar en la sangre.
Aunque no se sabe con certidumbre cómo es que operan en el organismo, numerosos estudios han relacionado estos compuestos con la prevención del cáncer y las enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas.
Los investigadores de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud de ECU analizaron datos de un estudio sobre la dieta en Dinamarca que involucró la alimentación de 53.048 daneses a lo largo de 23 años.
Descubrieron que las personas que habitualmente consumieron cantidades entre moderadas y altas de alimentos ricos en flavonoides -compuestos que se encuentran en frutas, verduras y bebidas en base a hierbas y plantas- eran menos propensas a morir de cáncer o enfermedades cardíacas.
¿Qué alimentos son ricos en flavonoides?
Son muchos, que varían en su concentración y tipo dentro de la gran familia de flavonoides como los flavonoles, flavanoles (con «a»), flavanonas, flavonas y antocianidinas, entre otros.
Brócoli, coles de Bruselas, puerros y cebollas. Estos son algunos de los alimentos del grupo de flavonoles. Se les adjudican propiedades antihistamínicas, antiinflamatorias y antioxidantes.
Manzanas, uvas, cacao, té verde. Forman parte de los que contienen flavanoles y están asociados con mejorar la salud cardiovascular y neurológica. Estos compuestos también están presentes en el vino tinto.
Naranjas y otros cítricos. Pertenecen a las frutas ricas en flavanonas, relacionadas a la salud cardiovascular, el relajamiento y la actividad antioxidante y antiinflamatoria.
Apio, perejil y otras hierbas y chiles. Son buenas fuentes de flavonas, conocidas por sus propiedades antioxidantes y por retrasar el metabolismo de fármacos.
Arándanos, ciruelas, uvas rojas y moradas y vino tinto. Están cargados de antocianidinas que se asocian con buena salud cardíaca y efectos que ayudan a controlar la obesidad y la diabetes.
¿Qué dice el reciente estudio?
Los investigadores de la Universidad Edith Cowan señalaron que los participantes que consumieron un total aproximado de 500 miligramos de flavonoides al día registraron el menor riesgo de morir de cáncer o enfermedad coronaria.
«Estos resultados son importantes porque resaltan el potencial para prevenir el cáncer y la enfermedad coronaria mediante la promoción del consumo de alimentos ricos en flavonoides, particularmente en personas con alto riesgo de sufrir estas enfermedades», expresó la doctora Nicola Bondonno, líder de la investigación.
«Es importante consumir una variedad de diferentes compuestos de flavonoides que se pueden encontrar en sendos alimentos y bebidas vegetales», recomendó la doctora Bondonno.
Esa recomendación es fácil de lograr con la siguiente dieta: una taza de té, una manzana, una naranja, 100 gramos de arándanos y 100 gramos de brócoli. Eso «proveería una amplia gama de compuestos de flavonoides y más de 500 mg en total flavonoides», dijo.
La doctora explicó que aunque las investigaciones habían establecido una asociación entre el consumo de flavonoides y un menor riesgo de muerte, la naturaleza exacta del efecto protector no estaba clara aunque probablemente sería multifacética.
Fumadores y bebedores
Lo llamativo del estudio es que encontró que el efecto protector parecía ser más fuerte en aquellas personas con mayor riesgo de sufrir enfermedades crónicas por fumar o beber alcohol.
«Tanto el consumo de alcohol como fumar aumentan la inflamación y dañan los vasos sanguíneos, que pueden incrementar el riesgo de una gama de enfermedades», dijo Bondonno.
«Se ha demostrado que los flavonoides son antiinflamatorias y mejoran la función de los vasos sanguíneos, lo que podría explicar por qué se les asocia con un menor riesgo de mortalidad por enfermedad coronaria y cáncer».
Sin embargo, advirtió que también es importante resaltar que el consumo de flavonoides no contrarresta todo el aumento de riesgo de muerte ocasionado por fumar y consumir alcohol. Exhortó que lo mejor para la salud sería dejar de fumar y reducir el beber alcohol.
«Sabemos que estos cambios de estilo de vida pueden presentar un gran desafío, así que instar a consumir flavonoides puede ser una manera innovadora de aliviar el incremento de riesgo, al tiempo en que se alienta a las personas a dejar de fumar y reducir la ingesta de alcohol», añadió.
La doctora dijo que el siguiente paso en la investigación será analizar más de cerca qué tipos de enfermedad coronaria y cánceres son mejor prevenidos por los flavonoides.
El estudio de la ECU fue publicado el 13 de agosto en la revista especializada Nature Communications y se realizó en colaboración con el Hospital Universitario Herley & Gentofte, la Universidad Aarhus, así como con el Centro de Investigación de la Sociedad Danesa contra el Cáncer, el Hospital Universitario Aalborg, la Universidad del Occidente de Australia y la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer.
Tomado de BBC Mundo