El Día 
Pasado este proceso tan pesado, denso y complicado, que fueron las elecciones en un país tan pintoresco como el nuestro, ¿qué podemos esperar ahora del mismo gobierno, pero con capitán distinto?
Esa es la pregunta del millón que estará pendiente de resolverse en los próximos años. En realidad, y no es que sea pesimista, sino haciendo un ejercicio realista a lo cual trato de habituarme, no espero milagros, ni nada parecido, sino una continuación del trabajo lineal bajo los mismos parámetros que viene ejerciendo el Presidente Fernández.
Lo importante es que atravesamos este proceso, y no ha hecho falta una agotadora segunda vuelta, en un país en que celebrar elecciones cada cuatro años, continúa siendo una locura. Gastos y despilfarro excesivo, en el que a ninguno de los actores de este circo politiquero les importa, porque reciben sus dádivas millonarias y convierten al país, en una verbena nauseabunda. La JCE, por su parte, cumplió con su papel, para bien o para mal, en este tinglado.
Por lo demás, continuamos con los mismos problemas de siempre, con las carencias de los principales servicios públicos en la vida cada uno de nosotros, con las mismas deficiencias como Estado, en base a un sistema fallido desde hace tiempo. Seguiremos la senda de los casos de corrupción que faltan por conocerse y los que quedarán o ya están durmiendo el sueño eterno, en un aparato judicial de mofa.
Por otro lado, imagino, que los del PRD y aquellos tránsfugas llegados de otros polos en el último minuto, tenían la corazonada de que no iban a salir airosos de este proceso. El PRD en su tiempo fue un partido fuerte y digno, pero desde hace más de una década es una jauría, de animales hambrientos que no logran conectar y ponerse de acuerdo para repartirse el pastel. Y ni hablar del candidato en cuestión, un hombre al cual es mejor tenerlo callado. En el PLD, pasa casi lo mismo, lo que pasan es que allí son más simuladores y manejan el poder del histrionismo mucho mejor, aunque hayan perdido a varios dirigentes en el camino.
Mientras esto sucede, y los dirigentes del PLD se reorganizan para continuar con el ejercicio gubernamental, es propicio alertar a los demás partidos que tuvieron la entereza de presentarse a estas elecciones, para que trabajen arduamente en estos años y puedan afianzarse fuertemente, como verdaderas fuerzas políticas, para los próximos comicios. Yo apuesto, por un cambio de raíz para las elecciones venideras en nuestros país. Quiero líderes nuevos, propuestas nuevas, profesionales certeros y sin manchas, cero demagogias baratas ni sloganes absurdos.
En fin, Danilo Medina gobernará gracias a los demás partidos pequeños que sumaron su apoyo a éste PLD, que trata de reinventarse para cuatro años más de gobierno, y cuidado si para más .Espero que este hombre, tenga más mano dura, que el actual mandatario para enfrentar las situaciones corruptas de sus amigos del partido, ¿quimera?. No obstante, a mi modo de ver, el gran triunfador de este proceso es el Presidente Fernández, no Danilo. El Presidente seguirá en la sombra, como los buenos estadistas, moviendo hilos, con su silencio de siempre y su manera peculiar del ejercicio público.
PD: Danilo no te olvides del 4% para la educación, ya que has dicho que harás lo que nunca se ha hecho, pues esperamos por esto. Hazlo tú, porque Fernández se ha olvidado .
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