Promulgación concita respaldo; ley implica sanciones duras para delitos

Se coincide en que nueva normativa contribuirá a modernizar y fortalecer el sistema contra hechos graves. Conep, procuradora general y juristas la califican como gran avance.
SANTO DOMINGO.-La promulgación del nuevo Código Penal, contenida en la Ley 74-25, ha generado un consenso poco común en el ámbito nacional: diversas voces del sistema de justicia, la sociedad civil y el empresariado coinciden en que se trata de un paso positivo y trascendental para el fortalecimiento del Estado de derecho y la adecuación del marco penal a los desafíos del presente.
Para la procuradora general de la República, Yeni Berenice Reynoso, la entrada en vigencia de este nuevo código representa el cambio más significativo en materia penal desde 1884.
“República Dominicana tiene un nuevo Código Penal, en términos generales, acorde a las nuevas tendencias de la teoría del delito”, expresó, subrayando que el instrumento ha sido sometido a un riguroso análisis jurídico por parte del Ministerio Público.
La magistrada también valoró el rol de los legisladores que “trabajaron más allá de lo visible” para garantizar que el nuevo marco tuviera un enfoque progresivo.
“Aunque toda ley es perfectible, hoy hemos avanzado por el bien de la sociedad”, puntualizó la jefa del Ministerio Público.
Clave contra corrupción
La Alianza Dominicana Contra la Corrupción (ADOCCO) celebró la promulgación del nuevo código como un punto de inflexión en la lucha contra la corrupción administrativa. Por primera vez, el delito de corrupción es abordado de forma estructurada, con un título completo que lo define, tipifica y sanciona con claridad.
Modernización
Desde el sector empresarial, el Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) consideró que esta reforma legal representa un paso firme hacia la modernización institucional y la seguridad jurídica.
“Reafirmamos nuestro compromiso con una justicia que promueva confianza ciudadana y un marco legal que acompañe el desarrollo económico y social del país”, expresó el gremio en un comunicado.
Valoró el hecho de que la reforma haya sido producto de años de debates, consensos y escucha activa a los diversos sectores sociales, lo cual fortalece su legitimidad democrática.
Actualización doctrina
El expresidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Subero Isa, saludó la aprobación del nuevo código como el cierre de una etapa dominada por una legislación “obsoleta y arcaica”. “La carga se empareja en el camino”, escribió, haciendo un llamado a la comunidad jurídica a prepararse para su implementación.
Subero Isa destacó que el nuevo instrumento ofrece una oportunidad para revitalizar el pensamiento penal dominicano.
Nuevas penas
El nuevo Código Penal dominicano establece un endurecimiento significativo en la escala de las penas para las personas que cometan infracciones, las cuales dependerán de la gravedad del daño ocasionado a la víctima o a la sociedad.
Las sanciones se determinarán según la gravedad del hecho, clasificándose como delitos graves, menos graves y leves, con penas que oscilan entre 4 a 40 años de prisión.
La nueva legislación establece que, en los casos en que una persona enfrente varios procesos judiciales separados y sea hallada culpable en cada uno de ellos, el imputado será condenada por cada hecho cometido.
Las sentencias deberán ejecutarse para iniciar su cumplimiento de forma consecutiva, aunque el Código establece un límite máximo de acumulación de condenas de 60 años de cárcel.
Además de las penas privativas de libertad, el nuevo Código Penal dominicano contempla la imposición de multas y sentencias complementarias. Entre estas sanciones adicionales se incluye el decomiso de bienes muebles e inmuebles a favor del Estado, junto con otras medidas disuasorias.
Sexo no consentido
Quienes incurran en actividad sexual no consentida dentro de una relación de pareja podrían enfrentar penas de entre diez y veinte años de prisión mayor, además de multas de veinte a treinta salarios mínimos del sector público.
Así lo establece el artículo 136 del nuevo Código Penal de la República Dominicana, promulgado recientemente por el presidente Luis Abinader, tras su aprobación en el Congreso Nacional.
La nueva legislación introduce sanciones más severas para los delitos sexuales, incluyendo aquellos cometidos dentro de relaciones de pareja y bajo circunstancias agravantes.
Inducción al suicidio
El proyecto de nuevo Código Penal de la República Dominicana contempla sanciones severas para quienes induzcan, persuadan o cooperen en actos que conduzcan al suicidio de otra persona, con penas que pueden alcanzar hasta 20 años de prisión en los casos más graves.
Feminicidas y agresores
Una de las principales novedades es la tipificación diferenciada del feminicidio, que será castigado con penas de entre 30 y 40 años de prisión, además de multas más severas.
En casos agravados —como cuando la víctima es una persona vulnerable, el hecho ocurre frente a menores de edad, hay abuso de poder o se incumple una orden de protección—, la sanción será de 40 años.
Reacciones
—1— Un hito
El Consejo Dominicano de Unidad Evangélica expresa su satisfacción y agradecimiento por la reciente promulgación del nuevo Código Penal por el Poder Ejecutivo, calificándola como un hito trascendental.
—2— El Senado
Se plantea que la ley podría ser objeto de modificaciones mientras se espera el año para su aplicación.
Congreso Nacional cree legislación es positiva
Satisfacción. El Congreso Nacional saludó la promulgación del nuevo Código, aprobado la semana pasada solo con la causal cuando peligre la vida de la mujer para permitir la interrupción del embarazo. La reacción sobre la promulgación del Poder Ejecutivo vino de los presidents de la Cámara de Diputados y del Senado de la República, Alfredo Pacheco y Ricardo de los Santos.
Pacheco destacó el esfuerzo de los diputados y los senadores para la aprobación de esta normativa.
De su lado, el presidente del Senado, Ricardo de los Santos, dijo que la normativa representa un avance significativo en el fortalecimiento del Estado de derecho y agradeció al presidente Abinader por decisión.