New York.-“Un año bendecido”. Así califica Jean Segura su primera temporada como integrante de los Diamondbacks de Arizona, equipo al que pasó en un canje durante el invierno luego de disputar más de tres campañas con los Cerveceros de Milwaukee.
El infielder dominicano representaba una incógnita al momento de producirse el cambio, ya que venía de batear .246 con 11 cuadrangulares en 288 juegos entre el 2014 y el 2015.
Fue un llamativo declive tratándose de un jugador que fue convocado al Juego de Estrellas en 2013, su primera campaña completa en Grandes Ligas y la que finalizó con promedio de .294, 12 jonrones y 49 impulsadas.
Dado que de cara a la temporada del 2016 los D-backs ya tenían un exceso de jugadores en sus filas para el medio del cuadro interior – incluyendo a Nick Ahmed,Jake Lamb, Chris Owings, Phil Gosselin y Brandon Drury – la adición de Segura generó mucho escepticismo.
Pero Segura ha premiado la fe que demostró la novena de Arizona al adquirirlo, ya que se ha mantenido saludable y productivo.
De hecho, el oriundo de San Juan de la Maguana está en posición de rebasar los números que registró en el 2013. Segura llegó a la acción de ayer bateando, .308 con 10 bambinazos y 44 impulsadas este año y se encuentra en el tercer lugar de la Liga Nacional con 136 imparables.
Ha hecho todo eso como primer bate regular, una responsabilidad relativamente nueva para él.
Segura, de 26 años de edad, atribuye su repunte con el madero en parte a unos ajustes mecánicos que ha hecho dentro de la caja de bateo, siendo el más notable la posición de las manos. “A veces en la vida hay que hacer cambios”, dijo Segura.