Israel prometió ayer responder con fuerza a Irán después de culpar a la república islámica por el ataque con bomba contra un autobús repleto de turistas israelíes en Bulgaria, y en el cual murieron al menos siete personas y 30 quedaron heridas.
El bombazo ocurrido en un tranquilo pueblo turístico del Mar Negro fue el más reciente de una serie de ataques atribuidos a Irán que han tenido como objetivo israelíes y judíos en el extranjero, y amenaza con escalar a una guerra entre los acérrimos enemigos.
Irán ha negado estar involucrado en ataques pasados, pero no ha hecho comentarios sobre el estallido q ue le atribuyó ayer el gobierno de Israel.