Irak se levanta y protesta en calles

Bagdad.-Centenares de manifestantes se congregaron ayer en Basora, ciudad del sur iraquí, para reclamar la renuncia del gobernador local, en tanto otros tomaron un edificio oficial, en las muestras más recientes de la furia que se extiende por todo el país ante la ineficiencia de los servicios y el elevado desempleo.
Unas 600 personas se congregaron frente a la sede del gobierno provincial y forcejearon con la Policía, aunque en general el acto fue pacífico, según testigos.
Exigimos el despido del gobernador, porque no ha hecho nada bueno por Basora, dijo Mohamed Alí Jasim, un padre de nueve hijos que salió a protestar en la segunda ciudad del país, 550 kilómetros al sureste de Bagdad.
En Nasir, 270 kilómetros al sur de Bagdad, decenas de manifestantes irrumpieron en la sede municipal y la incendiaron, dijo un policía en la capital provincial de Nasiriyá, hablando bajo anonimato.