Lo que ocurre ahora con el cuestionamiento de los resultados de las primarias del domingo evidencia el mismo episodio que hubo durante el debate a favor y en contra de la reforma de la Constitución.
El enfrentamiento sobre si el presidente Danilo Medina podía o no reelegirse para los comicios de 2020 o, en caso contrario, permitirse su habilitación para 2024 abrió heridas que no han podido cerrarse, que ahora se profundizan con el conflicto desatado por denuncias de supuesto fraude en las primarias del domingo.
Nuevamente el país vuelve a ser sacudido por un clima de tensión que produce incertidumbre en la actividad económica y social, en caso de mantenerse por largo plazo.
¿Unidad y diálogo?
El camino trillado por el expresidente Leonel Fernández y sus seguidores está distante del deseo de algunos dirigentes del PLD que exhortan al diálogo y al desprendimiento de su actitud para aceptar los resultados adversos y que dan favorito a Gonzalo Castillo para la candidatura presidencial.
Fernández, vistos los más recientes acontecimientos, no puede dar marcha atrás en la defensa de su alegada victoria en ese proceso interno, igual como lo hizo cuando emprendió la lucha contra la reforma de la Constitución para permitir la reelección o la habilitación política de Medina.
Caos en la JCE
La manifestación de ayer del grupo de Leonel Fernández produjo serias dificultades en la cotidianidad en los alrededores de la Junta Central Electoral, principalmente caracterizada la situación por un caos en el flujo vehicular que se prolongó por varias horas.
El hecho obligó por igual a que se produjera militarización en el entorno de la JCE en prevención de desorden.
