Santo Domingo.-El Gobierno contempla reducir sus gastos entre 55 mil y 60 mil millones de pesos en 2013 aplicando una serie de medidas, entre las que se incluye la reducción del personal diplomático en el exterior.
Así lo informó ayer el ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Temístocles Montás, quien aseguró que el Gobierno también se sacrificará aplicando medidas para reducir la inversión pública en unos 48 mil millones de pesos y que será un recorte de inmediato.
Explicó que en este año habrá una reducción de casi RD$5 mil millones en la asignación al sector eléctrico y RD$3 mil millones en bienes y servicios, medidas de ajuste que al ser implementadas significarán un ahorro entre 55 y 60 mil millones de pesos al año.
Dijo que se está en proceso de la reforma del Estado, pero que es un proceso lento que se va haciendo de manera paulatina, y la idea es llevarlo a un gran nivel de racionalización.
Aseguró que pese al déficit la economía del país está estable, porque no se ha disparado la tasa de cambio ni la inflación.
El déficit se ha incrementado, en los últimos meses hasta junio se ha manejado más o menos bien, ha habido un incremento importante entre junio y agosto y ya la proyección es que este año vamos a terminar en 6% del PIB y el año que viene en 4% o menos. Eso quiere decir que habrá una reducción de casi 50 mil millones de pesos, dijo.
También congelarán algunos salarios públicos.
Favorece reducción cónsules
El ministro de Relaciones Exteriores, Carlos Morales Troncoso, favoreció ayer la reducción del personal diplomático y consular del país, como medida para ahorrar recursos y solventar el déficit económico que tiene el país en más de 170 mil millones de pesos.
Morales recordó que antes de ser canciller del país estuvo en el sector privado, donde siempre se ha destacado la calidad del gasto.
Siempre he favorecido la racionalización del servicio exterior; ésta no es la primera vez que estoy como Canciller y lo hice en el año 1994-96 y estoy dispuesto a seguir haciéndolo, dijo.
Algunos sectores condicionaron su apoyo a la reforma fiscal a más sacrificios del Gobierno.
