Santo Domingo.-Como un preaviso o alerta de lo que podría suceder en el país en materia de construcciones definió Rafael Pineda, uno de los vecinos, el desplome de un edificio de la calle Octavio Mejía Ricart del ensanche Ozama, que dejó atónitos a residentes del entorno y obreros de la obra.
Aunque no se registraron víctimas humanas del hecho, ocurrido el sábado a las 8:20 de la noche, hoy le queda un gran trauma a Nathalí Frías, de 23 años, sobreviviente del hecho, y sus familiares.
Estos perdieron la vivienda número 15, contigua a la construcción, que quedó aplastada por la estructura caída, así como semi destruida una jeepeta que tenían aparcada en su marquesina.
Me salvé por un pelo, era la única que estaba dentro de la casa y mi hermano que estaba afuera me avisó que el edificio se estaba moviendo, y al salir enseguida se desplomó, narró entre sollozos, Frías.
Dijo que recibieron promesas de la dueña del edificio de que podían contar con ella.
Hoy Obras Públicas rendirá el informe de los técnicos y determinará, dependiendo de las causas, sí hubo negligencia, sí habrá de ir a la Justicia el ingeniero encargado de la edificación o en su defecto le suspenden el exequátur.
Frank Mota, asistente del titular de Obras Públicas Víctor Díaz Rúa, adelantó que en el informe físico y legal que emitan ofrecerán las recomendaciones, las que confrontarán con el que dará el Colegio Dominicano de Ingenieros Arquitectos y Agrimensores.
Tenía permisos
Miguelina Santana, encargada de Planeamiento Urbano del Ayuntamiento Santo Domingo Este, informó que la edificación de cuatro niveles y un gazebo, contaba con los permisos sobre uso de suelo, linderos, parqueos y densidad.
La misma se inició hace tres años y fue retomada hace unos tres meses por sus constructores.
Sin precedentes
Tras lamentar la situación, el presidente de la Asociación de Constructores y Promotores de Viviendas, Fermín Troncoso, calificó como un hecho sin precedente en el país, que sólo ocurre cuando alguien no se somete a las exigencias, y además cuando se trata de terremotos. A su entender se trata de una obra informal. Instó a los miembros de Acoprovi a cumplir con las normas establecidas por Obras Públicas.
Puede que se haya presentado una situación de deterioro en las fundaciones o base, comentó el ingeniero Praxitelis Segura.
Su colega Eddy Pujols Sanz, compartió la idea y agregó que pudo haber una falla estructural.
Parece que algo cedió en el suelo y haló las demás columnas, hay amarres de mala calidad y acero en cantidad, dijo el arquitecto Germán Pérez.