Brasil: cae popularidad de gobernadores y alcaldes tras pasos de Rousseff

BRASILIA.-Gobernadores y alcaldes de las grandes metrópolis brasileñas, Rio y Sao Paulo, sufrieron una fuerte caída de su popularidad, como le ha ocurrido a la presidenta Dilma Rousseff, luego de tres semanas de protestas callejeras que cargan contra la clase política en Brasil, según una encuesta de la empresa Datafolha divulgada el lunes.

El gobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, del opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) perdió 14 puntos a lo largo de junio, lapso en el que su aprobación pasó de 52% a 38%.

El alcalde de Sao Paulo, Fernando Haddad, del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), cayó en picada: los que consideraban su gestión buena o muy buena disminuyeron de 34% a 18%, y los que la evalúan mala o pésima escalaron de 21% a 40%.

En Rio de Janeiro, el gobernador Sergio Cabral perdió 30 puntos de popularidad (55% a 25%) y el alcalde, Eduardo Paes, 20 (de 50% a 30%).

Ambos pertenecen al Partido del Movimiento Democrático (PMDB), miembro de la coalición de gobierno La presidenta Dilma Rousseff perdió 27 puntos, y la aprobación a su gestión pasó de 57% a 30%.

Rousseff sigue encabezando las encuestas para las elecciones presidenciales de octubre de 2014, pero si fueran hoy iría a una segunda vuelta. Un 55% de los encuestados con pregunta abierta dijeron no tener candidato preferido a la presidencia.

Las manifestaciones callejeras que estallaron hace tres semanas reclaman mejores servicios públicos -como salud, transporte y educación- y deploran a los políticos y la corrupción.

Rousseff convocó este lunes a una reunión ministerial para debatir las propuestas del gobierno ante las protestas.

El martes pretende presentar al Congreso una propuesta de plebiscito para impulsar una reforma política que redefina la financiación de los partidos y un sistema electoral que acerque más a electores a los políticos.

«Nuestra obligación es escuchar el mensaje (de las calles)» y ofrecer respuestas, dijo Rousseff el lunes en su programa semanal de radio, en el que reiteró su propuesta de un pacto con gobernadores y alcaldes para ofrecer «soluciones rápidas y concretas para algunos problemas de la economía, el transporte, la salud, la educación y la política».