Tal y como dice la salsa que popularizaron Héctor Lavoe y Willie Colón: “Todo tiene su final, nada dura para siempre.

Tenemos que recordar que no existe eternidad”, y es algo que debe entenderlo el dominicano Juan Francisco Puello Herrera, quien tiene desde 1991 como presidente de la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe. En los últimos años, Puello Herrera en la Confederación está de conflictos en conflictos.

Recuerden que tiene un problema abierto con Cuba, hasta el punto de ser acusado por la Federación Cubana de Béisbol (FCB) de sucumbir a las presiones de Estados Unidos para que la isla no participe en la Serie del Caribe.
En 2019, Puello Herrera y la Confederación recibieron fuertes críticas del presidente venezolano Nicolás Maduro por quitarle la sede de ese año y realizarla en Panamá.

Maduro los tildó de “sucios (…) y sucios les dije y sucios se quedan, son unos sucios ladrones inmorales (…)”.

La celebración de la Serie en Panamá fue súper conflictiva, tanto que José Mallén, presidente de las Estrellas Orientales en ese entonces, se quejó por incurrir en gastos que superaron los 200 mil dólares, cumpliendo con pagos de boletos aéreos, alojamientos, pagos de quincena y dietas a los jugadores que no les correspondían.

En la asamblea de la Confederación celebrada en 2019 en Puerto Rico, los presidentes de las ligas Dominicana y de México, Vitelio Mejía y Omar Cañizales, respectivamente, enfrentaron a Puello Herrera, quien tuvo que “ingeniársela” para lograr su octava reelección consecutiva al frente de ese organismo.

Los ataques frontales de Mejía no fueron olvidados por Puello Herrera, quien se la desquitó con gallardía, aún perjudicando a su país.

No hay forma que Puello Herrera diga que esa no fue la razón, debido a que fue testigo presencial de que los dominicanos apoyaron esta vez, como nunca, la Serie del Caribe y aún así los castigó al dejarlo sin ese evento en por lo menos las próximas siete versiones.

Ahora queda por verse si Puello Herrera cumplirá con el anunció de que este será su último periodo 2019-23 al frente de esa entidad. Para ello es bueno recordar el merengue de Guandulito: “Mi compadre, váyase en paz”.