SANTO DOMINGO.-La simple promoción de que la embarcación de origen francés “Plastic Odyssey”, tiene previsto zarpar en las costas de República Dominicana, es motivo de regocijo entre conocedores del impacto que tienen estos desechos en los océanos.

Para Raulín Zapata, ecólogo con maestría en tecnología ambiental y especialidad en microplásticos, así como María José Fernández, que formó parte de la tripulación “Sea Education Association o SEA Semester”, ven en el “Plastic Odyssey”, una oportunidad para mitigar los impactos negativos de esos residuos en la vida marina.

“La contaminación plástica se ha convertido en uno de los principales problemas ambientales que afecta al mundo, ya que el rápido aumento de la producción de plásticos desechables supera la capacidad instalada del planeta para reciclarlos”, comentó Raulín Zapata.

El fenómeno, a su entender es más visible en los países en vías de desarrollo, donde los sistemas de recolección de desechos son a menudo ineficientes o inexistentes, y estos países aportan entre el 80 al 90 por ciento de estos contaminantes en los océanos.

Justo con este objetivo de fomentar el reciclaje del plástico es que surge el Plastic Odyssey, como su nombre indica, una odisea, dijo Zapata, y refirió que ese barco busca educar sobre la importancia de reducir el uso del plástico y las técnicas de reciclaje. Lo más importante de este proyecto apoya a los emprendedores que desarrollan iniciativas innovadoras para procesar el plástico, contribuyendo a que se conviertan en empresarios.

Microplásticos secundarios llegan a los océanos vía terrestre, al ser tirados al descuido por la gente e impactan las especies.

Así se evita que estos lleguen a los océanos y se reduzca el impacto a los ecosistemas marinos, añadió el ecólogo tras indicar que se deben aplaudir estas iniciativas que buscan una solución sostenible a la contaminación por plásticos en los mares.

“Me parece un programa muy interesante de “crowd sourcing” trabajando con personas, empresas, y proyectos locales en cada lugar que visitan para aprender, compartir, y crear soluciones contra el problema mundial del plástico en los océanos”,dijo María José Fernández Educadora al Aire Libre que desarrolla programas que conjuga la historia local de los lugares que visitan y la biología marina, y define de interesante la expedición de tres años alrededor del mundo tratando de encontrar soluciones en relación al plástico a través de una especie de atelier para crear nuevos materiales.

“Es importante recalcar que es un programa de educación para encontrar soluciones’, añadió María José Fernández al referirse al antiguo buque de investigación oceanográfica. La embarcación que inició su recorrido en Francia sigue travesía por distintos países.

Características

— Perfil
El barco laboratorio tiene más de 200 metros cuadrados, capacidad de carga de unas 20 toneladas de material; acoge por una semana a voluntarios y uno de sus objetivos es documentar soluciones probadas para afrontar los casos de contaminación.