Santo Domingo.-Víctor Liz, capitán de la selección nacional de baloncesto de mayores, no ha decidido aún si la venidera Copa Mundial FIBA será su última como miembro del conjunto quisqueyano.

Pero de lo que sí está completamente convencido el brillante escolta es de “que disfrutaré y me divertiré al máximo en ese gran evento”.

El jugador nativo de Santiago, no descartó retirarse de la selección dominicana en el Mundial, programado para celebrarse en Filipinas, Japón e Indonesia del 25 de agosto al 10 de septiembre.

Sin embargo, el jugador, que va a su cuarta presencia en la competición mundialista vistiendo el jersey de República Dominicana, aclaró que “todo va a depender de cómo me encuentre físicamente y de lo que nuestra selección pueda alcanzar en términos de resultados”.

“Pero si tomo la decisión (de retirarse) durante ese evento, planeo que sea algo bonito, en un juego específico, con alguna ceremonia o algo parecido”, precisó Liz.

Reveló que continúa trabajando arduamente en la recuperación total de la lesión que sufrió en el cuello, la cual afectó seriamente nervios de dicho órgano, así como su brazo derecho.

“Me encuentro en un 70 o 75 por ciento de alcanzar mi plena condición física, para entonces integrarme en cuerpo y alma como siempre lo he hecho a mi selección durante tantos años”, explicó Liz durante una reciente entrevista realizada por el cronista Junior Matrillé a través de su plataforma de Youtube.

Recordó que la lesión le hizo perderse una de las ventanas del clasificatorio FIBA y “en la última pude integrarme a mi selección, pero no en las condiciones que yo siempre he acostumbrado”.

Manifestó que por el momento, su mente, cuerpo y alma están puestos en lograr la total recuperación de su lesión en el cuello y entonces poder disfrutar a plenitud junto a todos sus compañeros, de otro Mundial FIBA.

Sueño olímpico
Explicó que desde que empezó a formar parte de la selección nacional, además de competir en un Mundial, “mi sueño ha sido siempre jugar con Dominicana en unos Juegos Olímpicos”.

Esto significa que, si el elenco quisqueyano logra una histórica clasificación a los Juegos Olímpicos de París, “voy a continuar, y para mí será más que un honor ponerme la franela de mis selección en ese increíble escenario”.

Nada fácil

— Camino tortuoso
“No ha sido nada fácil enfrentar mi recuperación, todavía estoy en el proceso, incluso el doctor que me trata en Puerto Rico, está sorprendido de yo esté jugando y de que lo he estado haciendo tan rápido”, dijo Liz.