Unión Europea decide proseguir el diálogo político con Cuba

LUXEMBURGO.- Los cancilleres de la Unión Europea (UE) reunidos el lunes en Luxemburgo decidieron proseguir el diálogo político establecido con Cuba en 2008, pese a lamentar la falta de progresos en materia de derechos humanos en la isla.
La UE aprobó «continuar y profundizar el diálogo político» priorizando «la democracia, los derechos humanos y las libertades fundamentales» en Cuba, según una declaración conjunta de los cancilleres, afirmando que proseguirán los contactos tanto con las autoridades cubanas como con la «oposición democrática pacífica».
La declaración lamenta empero «la falta de progresos en la situación de los derechos humanos en Cuba, en particular en el campo de derechos civiles y políticos» y exige «la liberación incondicional de todos los prisioneros políticos, incluidos los detenidos en 2003».
Subraya igualmente «la importancia de llevar a cabo reformas sociales y económicas para mejorar las condiciones de vida de los cubanos» y de «garantizar la libertad de información y expresión, incluido el acceso a internet» para la población.
De esta forma, la UE decidió proseguir el proceso de apertura hacia Cuba iniciado en 2008 con el levantamiento definitivo de las sanciones impuestas cinco años antes por el encarcelamiento de 75 opositores políticos.
Pese a las reticencias mostradas en los días anteriores por países como Suecia y República Checa, los 27 decidieron apostar por la vía del diálogo, siguiendo la política de acercamiento de la administración estadounidense de Barack Obama.
España, el mayor apoyo de Cuba en el seno de la UE, se congratuló de la resolución europea, destacando que Europa no puede «quedarse atrás en relación a otros países» latinoamericanos y a Estados Unidos con respecto a La Habana.
El canciller español, Miguel Angel Moratinos, calificó de «positivo» el paso dado por la Unión Europea, que «ha eliminado de su vocabulario toda referencia a las sanciones contra Cuba».
Moratinos pidió un diálogo «sereno y constructivo» con las autoridades de la isla, de cara a una perspectiva de un «acuerdo común, con obligaciones y responsabilidades de ambas partes», que podría concretarse durante la presidencia española de la UE en el primer semestre de 2010.