Tiempo de estudiar

Tiempo de estudiar

Tiempo de estudiar

En el país, de un tiempo a esta parte, el béisbol ha pasado por varias etapas. Inicialmente era uno de los espectáculos masivos de gran preferencia del público, y de pasatiempo o recreación se ha convertido en una profesión soñada por una impresionante cantidad de jóvenes dominicanos.

El sueño tiene una fuerte motivación económica, ya que a corta edad, y sin que los prospectos lleguen a la mayoría de edad o terminen la educación secundaria, ya son agraciados con ofertas de bonos y contratos que superan los 4 millones de dólares. Una inmensa fortuna cuando se convierte a moneda nacional.

El deporte, de acuerdo a los especialistas y educadores, puede cambiar la condición económica de un individuo, y de paso la de su entorno familiar más cercano, pero solo la escuela cambia la vida de una persona, ya que dota a los seres humanos de conocimientos y valores fundamentales para convivir en sociedad y aportar al desarrollo colectivo.

La educación es una labor de siglos. Tiene más tiempo que el béisbol beneficiando al país. No se puede partir del auge momentáneo de este deporte para plantear cambios fundamentales en otras áreas de la vida nacional; y menos con incidencia directa en la escuela.

Hace poco se sugirió públicamente que había que implementar un “Bachillerato deportivo” mención Béisbol.
Si queremos ser coherentes con la calidad de la educación hay que seguir invirtiendo el dinero de los impuestos del pueblo dominicano en una educación universal, que beneficie a la inmensa mayoría de dominicanos que sí tiene un lugar asegurado en las aulas del sistema educativo dominicano.

Se trata de una inmensa mayoría que apuesta a un futuro promisorio, más sólido y que tiene muchas razones para encontrar su superación en los libros y el conocimiento.



Etiquetas